Una inesperada filtración de un borrador de la Reforma Educativa que impulsa el Gobierno ha puesto en jaque la estrategia oficialista de avanzar en silencio, provocando una rápida respuesta de la Casa Rosada que busca congelar el debate para contener la polémica.
El documento, que circuló de manera interna dentro del propio ecosistema libertario, expuso los puntos más sensibles de un proyecto que, según sus críticos, significaría un cambio de raíz en la educación argentina, transformándola en un «mercado de ofertas desiguales».
Reacción Oficial: «Pacto de Confidencialidad» Roto
La tensión escaló rápidamente tras la difusión del borrador. La senadora Carolina Losada, aliada del oficialismo e integrante del Consejo de Mayo (el órgano multisectorial encargado de elaborar la propuesta), tuvo que salir a dar explicaciones, mostrando un evidente fastidio.
«Hay filtraciones que no hacen bien a lo que nosotros queremos hacer», sentenció Losada, confirmando implícitamente la autenticidad del texto. La legisladora insistió en que existía un «pacto de confidencialidad» sobre las bases del proyecto, el cual se rompió antes de que el Gobierno estuviera listo para presentarlo formalmente en el Congreso.
Ante la exposición pública de los bocetos, el Ejecutivo decidió «pausar» las reuniones del Consejo de Mayo, buscando retomar el control político de la agenda antes de que el debate se profundice en la opinión pública.
La Reforma al Detalle: Autonomía Total y Fin del Marco Común
El borrador filtrado revela una reforma ambiciosa y radical que contempla, entre sus principales ejes:
- Derogación de la Ley 26.206: El proyecto plantea la eliminación de la actual Ley Nacional de Educación.
- Autonomía Institucional: Se habilita a que cada institución educativa—sea pública, privada o «de iniciativa social»—defina su propio plan de estudios, calendario escolar, modalidades pedagógicas y criterios de contratación docente.
- Fragmentación del Sistema: Sin parámetros curriculares comunes, la educación se fragmentaría, permitiendo que la calidad y el acceso dependan directamente de los recursos de cada hogar y de la capacidad de competencia entre los establecimientos.
- Educación en Casa y Modelos Híbridos: Se incorpora formalmente la figura de la educación en el hogar (homeschooling) y se promueven los modelos de enseñanza híbridos.
El discurso oficialista en torno a esta iniciativa se centra en la «libertad educativa». Sin embargo, la filtración, según analistas consultados por Vive, revela un esquema que parece transferir la responsabilidad de garantizar una educación de calidad del Estado a las familias, lo que podría generar una mayor desigualdad educativa en el país.
El futuro del debate legislativo queda ahora en un impasse, mientras el Gobierno intenta reagrupar fuerzas y decidir la mejor manera de presentar su proyecto estrella sin exponerse a nuevas críticas anticipadas.

