Este domingo, en pleno Día del Amigo, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner reapareció brevemente ante la militancia que se congregó en la puerta de su departamento de San José 1111, en el barrio de Monserrat. Después de varios días sin asomarse, la líder del peronismo que hoy cumple prisión domiciliaria saludó sonriente desde el balcón del primer piso, en un gesto de agradecimiento hacia los militantes que, a pesar del frío y de las circunstancias judiciales, siguen mostrándole apoyo incondicional.
Decenas de personas se acercaron al histórico edificio para saludarla, portando banderas argentinas, bombos y pancartas con mensajes de aliento. Mientras tanto, en la vereda, la artista Marisa Vázquez interpretó en vivo “La descamisada”, la emblemática zamba que inmortalizó Nelly Omar, convirtiendo la escena en un homenaje emotivo cargado de simbología peronista y resistencia.
El momento fue breve pero intenso: entre aplausos, cánticos de “Cristina corazón” y banderas agitadas, la exmandataria sonrió, saludó con la mano y agradeció la presencia de sus seguidores antes de volver a entrar al departamento.
Cristina Fernández de Kirchner cumple arresto domiciliario tras haber sido condenada en la causa Vialidad. Si bien no está formalmente proscripta para participar en política, su situación judicial la mantiene fuera de la arena electoral, aunque su figura sigue siendo central para los sectores del peronismo kirchnerista que la consideran una referencia insustituible.
En paralelo, los cierres de listas para las elecciones legislativas en Buenos Aires han vuelto a poner en juego la interna oficialista, donde la “marca Cristina” sigue pesando a la hora de negociar lugares clave para sus leales.
El gesto de la expresidenta este domingo, justo en el Día del Amigo, fue leído por la militancia como una reafirmación del vínculo afectivo que la une con su base política más ferviente. A pesar de su situación judicial, su sola aparición en el balcón bastó para renovar la energía de quienes, entre bombos y banderas, siguen viéndola como un símbolo de lucha y lealtad.
