Se sabe que aquella patria que es la infancia nos marca para siempre, para bien o para mal. En la película “Cuenta conmigo” sobrevuela esa añoranza, el espíritu de hermandad, de cofradía entre el grupo de amigos que lleva, como puede, sus herencias familiares, dudas, miedos, pero en un momento sabe que es valiente, como dice Borges.
La historia se sitúa en el imaginario pueblo de Castle Rock, Oregón, Estados Unidos a fines de la década de 1950. Un grupo de adolescentes se propone salir en la búsqueda del cuerpo de un joven desaparecido en el bosque. Sería la primera vez que conocerían un muerto de su misma edad. Viven distintas peripecias, se enfrentan con brabucones un poco más grandes, lloran sus penas y ríen por pavadas. Crecen.
Esta historia, que se filmó con poco presupuesto y sin grandes pretensiones, es considerada “de culto”. El mismísimo Stephen King, autor del libro, dice que salió temblando de la emoción después de verla y aseguró que era la mejor adaptación que había visto de sus novelas. Además, se sumó, por afuera del guion, la muerte posterior por sobredosis de River Phoenix, que encarnaba a Chris Chambers en el film.
El director, Rob Reiner, afirmó en una entrevista que “Cuenta Conmigo” es una de sus realizaciones más significativas. Recordemos que en su haber tiene títulos emblemáticos como “Cuando Harry conoció a Sally” y “Misery”, entre otros. Pero hay algo en “Cuenta…” que conecta con un momento especial de la vida de todos, ese punto de transición entre el adiós a la niñez y la bienvenida a la adolescencia, con todo lo desconocido que ella trae.
Los amigos buscaban un cuerpo o, quizá, saber que había más allá del pueblo que les parecía gigante, pero, tras regresar de su vieja, les pareció más pequeño. Como pasa siempre. En verdad, querían saber cómo sería el futuro que golpeaba a la puerta con el final de la escuela primaria y el paso a la secundaria. Los caminos se empezaban a bifurcar.
“Nunca tuve amigos como los que tenía cuando tenía doce años. Dios, ¿alguien los tiene?”, dice Gordie, uno de los protagonistas y el relator de “Cuenta conmigo”, ya adulto al final del relato. Esa pregunta queda flotando en el aire y cada uno tendrá su respuesta.
Feliz Día del Amigo, aunque ya no tengamos doce años.
Y para acompañar la celebración de la amistad, con un toque de nostalgia, aquí van algunas canciones de la banda sonora de Cuenta conmigo compuesta por grandes éxitos de los años ’50 y ’60.
Ben E. King – Stand By Me
«Everyday» (Buddy Holly)
«Let The Good Times Roll» (Shirley & Lee)
«Come Go with Me» (Del Vikings)
«Lollipop» (The Chordettes)
«Great Balls of Fire» (Jerry Lee Lewis)