Francisco “Paco” Torres fue durante décadas la mano derecha de Paquita la del Barrio. Estuvo a su lado en giras, escenarios y entrevistas, convirtiéndose no solo en su manager, sino también en un amigo cercano. La muerte de la cantante, ocurrida en febrero de este año, marcó un quiebre en su vida.
Lejos de los reflectores y del ruido del espectáculo, Paco decidió darle un nuevo rumbo a su día a día. Desde hace tiempo alternaba su labor artística con un negocio de postres en un mercado de la Ciudad de México, y tras el fallecimiento de Paquita resolvió dedicarse de lleno a esa actividad.
Hoy, con humor y nostalgia, recibe a clientes en “El Rincón del Inútil”, un puesto de gelatinas y pasteles en el que también rinde homenaje a la artista. Fotos, frases célebres y recuerdos de su carrera decoran el local que ya se volvió una parada obligada para muchos vecinos y fans.

El cierre de una etapa con Paquita la del Barrio
El 17 de febrero, la intérprete de “Rata de dos patas” falleció a causa de un paro cardíaco en su casa de Veracruz. La noticia conmocionó al ambiente artístico y dejó un vacío entre sus seguidores. Para Paco, además, significó la necesidad de cerrar un ciclo.
Los hijos de Paquita le ofrecieron seguir trabajando en un restaurante familiar, pero él prefirió dar un paso al costado. “Ese capítulo está cerrado, fueron 25 años y ahora quiero disfrutar de mi vida”, declaró.
Con la tranquilidad de saber que acompañó a la artista hasta el final, Torres encontró en su negocio de postres una manera de mantenerse activo sin perder la conexión con sus raíces. Allí afirma «sentirse en paz y más feliz que nunca«.

El Rincón del Inútil: tradición y homenaje a Paquita
El local de Paco está ubicado en el Mercado Martínez de la Torre, en la colonia Guerrero de la Ciudad de México. Se trata de un espacio pequeño, pero lleno de vida y recuerdos. En sus paredes se pueden ver fotografías junto a figuras como Juan Gabriel, Marco Antonio Solís o Karol G, además de frases que inmortalizaron a Paquita.
El nombre del negocio, “El Rincón del Inútil”, es un guiño directo a la cantante y a su célebre “¿me estás oyendo, inútil?”. Ese detalle, sumado a la presencia de imágenes de la artista, transforma al puesto en una especie de altar popular donde la música y la repostería se entrecruzan.
Entre los sabores más pedidos está la gelatina de rompope, la favorita de Paquita, junto con propuestas más originales como tequila con higo o fresa con chocolate. A eso se suman pasteles, flanes y aguas frescas que completan una carta variada y accesible.

El menú y los precios del puesto de gelatinas del exmanager:
- Gelatinas: entre 12 y 14 pesos mexicanos
- Flan napolitano: 25 pesos mexicanos
- Porción de torta: 40 pesos mexicanos
- Aguas frescas: entre 10 y 30 pesos mexicanos según el tamaño.
- Tortas completas: entre 190 y 440 pesos mexicanos, según el sabor y el peso.
Además, hay combinaciones menos habituales como pasteles de piñón, rompope con durazno o cajeta con nuez, que se convirtieron en clásicos del mercado.
Una vida entre escenarios y mercados
Antes de ser representante de Paquita, Paco ya trabajaba en el mercado. Empezó a los 12 años en un puesto de postres y desde entonces nunca dejó esa actividad. Su historia es la de alguien que supo moverse entre dos mundos: la industria musical y la vida cotidiana de barrio.

Hoy, con más de 30 años en el mismo mercado, Paco sostiene que la repostería es su verdadera pasión. “Un día soñaba con hacer gelatina de tequila con higo y la hacía. Si pegaba, se quedaba”, contó en una entrevista. Así fue creando un menú que combina tradición con un toque personal.
Tras la muerte de Paquita, el exmanager decidió no involucrarse en disputas ni herencias. Para él, el capítulo de los escenarios quedó atrás. Su foco está puesto en el presente: su familia, sus clientes y el pequeño negocio que lo conecta con la comunidad.