Con profundo pesar, se conoció este domingo el fallecimiento de Ángel Mahler, reconocido compositor, director de orquesta, y figura clave del teatro musical argentino. Tenía 65 años. Mahler, cuyo nombre de nacimiento era Ángel Jorge Pititto, también se desempeñó como Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires entre julio de 2016 y diciembre de 2017.
La causa de su muerte fue un melanoma metastásico, con avance en pulmón y columna. Según un comunicado publicado en su cuenta oficial de Instagram, «el 29 de abril ingresó al sanatorio con una descompensación general grave producto de un derrame pleural».
Tras una batalla intensa contra la enfermedad, se fue «en paz, acompañado por el amor de su familia, después de haber dado una batalla intensa, con la lucidez, la dignidad y la entereza que siempre lo caracterizaron».
La trayectoria de Mahler estuvo marcada por su prolífica sociedad creativa con Pepe Cibrián Campoy, convirtiéndose en «la dupla creadora de musicales más prolíficas de la Argentina». Juntos, desde 1983, crearon obras que se volvieron clásicos de la cartelera porteña. Su mayor éxito conjunto, Drácula, el musical, estrenado en 1991, es considerado un ícono en la historia del musical argentino, habiendo vendido más de tres millones de entradas y obteniendo prestigiosos premios a la mejor música, como el Premio ACE y el Premio Estrella de Mar.

El comunicado oficial destaca la magnitud de su legado artístico: «Deja este plano un artista inmenso, cuya música tocó el corazón de millones de personas, y lo hace sólo para hacerse eterno en cada melodía que nos regaló a lo largo de su vida». Y, reflejando la creencia del propio artista, añade: «Como a él le gustaba creer: vivirá siempre en ellas, y sobrevolará este plano cada vez que suenen».
Además de su extenso trabajo en musicales con Cibrián y otros autores, Mahler compuso música para cine, incursionó en la música clásica con obras sinfónicas, formó parte de la banda de rock Espíritu, compuso para telenovelas y trabajó con artistas como Sandra Mihanovich y Marilina Ross. También condujo programas de televisión dedicados al teatro musical.

El mensaje de despedida incluye un agradecimiento a quienes lo acompañaron en su carrera y vida: «Gracias a quienes lo quisieron, lo escucharon, lo admiraron y lo acompañaron en tantos momentos. A todos sus familiares, amigos, artistas, músicos. A todos los que confiaron en él. A todos los que creyeron en él».
«Un agradecimiento especial y profundo a todo el cuerpo médico, enfermeros y staff del Sanatorio Finochietto que han hecho lo imposible para que pase estos días de la mejor manera y sin sufrimiento», concluye.