Dos vigilantes del establecimiento Carrefour situado en la Rambla de Barcelona han sido denunciados por un manifestante, quien les acusa de haberle agredido a puñetazos en el cuerpo y la cabeza y de rociarle con gas pimienta los ojos durante una concentración pro-Palestina.
Los hechos sucedieron el pasado lunes, cuando los activistas realizaban la manifestación en las puertas del establecimiento. Las protestas, realizadas diariamente en el mismo punto desde finales del pasado mes de julio, buscan denunciar a la cadena de supermercados, a quien acusan de “complicidad” con el régimen de Israel y con “el genocidio del pueblo palestino”.
El parte médico revela que el activista presentaba contusiones y lesiones múltiples
Según consta en la denuncia presentada en la comisaría de los Mossos, a la que ha tenido acceso EFE, el joven -Mohamad Baroud- asegura que se dirigió a un vigilante para pedirle poder hablar con un responsable de este comercio con el objetivo de recriminar la actitud del personal de seguridad hacia los manifestantes, a lo que aquel se negó.
Ante la insistencia del denunciante de poder hablar con un responsable, este vigilante le roció los ojos con gas pimienta, según consta en el escrito de la denuncia presentada ante la comisaría de los Mossos en la Rambla. El manifestante relata en la denuncia que, acto seguido, dos vigilantes de seguridad y un dependiente lo rodearon, y que tras agarrarlo, comenzaron a darle “diferentes puñetazos”.
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Agencias

Posteriormente, según la denuncia, lo llevaron al interior del establecimiento, a un cuarto, donde lo golpearon en la cabeza y le quitaron el móvil, en el que había un vídeo grabado por él mismo. El parte médico revela que el activista presentaba contusiones y lesiones múltiples, como en la zona lumbar, en el tabique nasal o en las muñecas, y una afección ocular.
Ayer martes por la tarde, un centenar de personas se concentraron a las puertas de este supermercado para apoyar al activista palestino, y una cuarentena de ellos logró acceder al interior del comercio, por lo que efectivos de los Mossos y la Guardia Urbana establecieron un dispositivo de seguridad y identificaron a estos manifestantes.