La Asociación de Fileteadores denunció esta tarde la censura de la exposición del 14º Encuentro Anual de Fileteadores que iba a realizarse en el Palacio Libertad.

Según el comunicado de la entidad, poco antes de la inauguración, para la que ya estaba todo preparado en el espacio cultural dependiente de la Secretaría de Cultura de la Nación, les fue informado que “debían bajar las obras con contenido político porque herían la susceptibilidad del gobierno nacional, puntualmente las referidas a la educación pública y al conflicto de Gaza”.
Consultadas fuentes del Palacio Libertad y de la Secretaría, a cargo de Leonardo Cifelli, nos dijeron que “la Subsecretaría de Patrimonio Cultural de la Nación ofreció el Palacio Libertad como lugar de instalación de la muestra Fileteado es Patrimonio, para darle mayor visibilidad a un arte que define la identidad de nuestro país, al cumplirse los diez años de la inscripción del filete porteño en la Lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, declarado por la Unesco. Desde el inicio de esta gestión al frente de la Secretaría de Cultura de la Nación se sostiene que en ningún efector (lugar) cultural habrá espacio para manifestaciones de índole político alguna”.
Palestina e Israel
Las fuentes consultadas por Clarín señalaron que la única discordancia con la Asociación de Fileteadores se presentó con las obras vinculadas a Palestina y la guerra de Israel en Gaza.
Con la firma de la curadora de la muestra, Ayelén Fagiani, y de la presidenta y vice de la entidad, María Cecilia Calvet y Marcos Paradizo, los artistas del filete dijeron que el encuentro anual se hará igual “con todos adentro, aunque esto implique mudar en 24 horas todas las obras y montar la exposición en otro espacio que defienda la democracia y la libertad de expresión como hacemos. Creemos en el arte como comunicador y transformador social”.
Desde la Secretaría de Cultura de la Nación dejaron claro que la decisión de dar de baja la exposición no fue ni de ese organismo ni del Palacio Libertad, sino de la Asociación de Fileteadores.
La decisión de la Secretaría respecto a despojar de contenidos políticos o ideológicos todas las actividades de los organismos a su cargo quedó clara durante la Feria del Libro Infantil. Y aún antes, en directivas a los museos nacionales, que no tomaron estado público.
Cuando se supo este invierno que, en su discurso de inauguración, la escritora María Teresa Andruetto se referiría al conflicto en Gaza en la Feria Infantil, el secretario de Cultura desistió de concurrir.
El total alineamiento del presidente Javier Milei con Israel es de conocimiento público. Tanto como que el primer ministro de ese país, Benjamin Netanyahu, no vendrá a la Argentina luego de que algunos abogados solicitaron la detención del funcionario israelí en territorio argentino. Milei y Netanyahu podrían reunirse a fines de septiembre durante la Asamblea General de la ONU en Ginebra.
Anoche había desazón en la Subsecretaría de Patrimonio, a cargo de Liliana Barela. Si alguien impulsó y consiguió la declaración del filete porteño como elemento del patrimonio cultural intangible, esa funcionaria fue Liliana Barela cuando estaba en el gobierno porteño.
Una activación importante
Fuentes del área cultural nos explicaron que “Liliana Barela lo pensó como una activación importante en el Palacio Libertad. La directora del espacio, Valeria Ambrosio, trató de retener la muestra, pero aunque la Asociación dijo que lo pensaría, a las 24 horas emitieron el comunicado. Nos quedamos con el colectivo fileteado en la puerta”, nos dijeron, esto último a modo de metáfora.
A la discrepancia se sumó que no se trató de una acción organizada por el Palacio Libertad, sino de la Asociación de Fileteadores, invitada a montar la exposición con más actividades. “Iba a haber charlas asociadas, un colectivo en la explanada, un caballo de madera fileteado y, al final, todo quedó en nada por tres cuadros”, nos dijo un vocero.
Solo falta saber dónde se montará finalmente la exhibición para ver las obras que provocaron la desinteligencia.