Hoy a las 9:30 comenzará en Salta la audiencia de los Grandes Juicios, en la que se debatirá la causa contra Nelson Leonardo Cositorto, imputado por los delitos de estafas reiteradas —en 118 hechos— y asociación ilícita, en concurso real.
El fundador de la financiera Generación Zoe será juzgado junto a Ricardo Gabriel Isaac Vilardel, Jorge Federico Vilardel, Ana Lucía de los Ángeles Vilardel y Vilma Griselda Albornoz.
El inicio del juicio oral estaba previsto originalmente para el 29 de mayo, pero fue reprogramado luego de que Cositorto informara la designación de un abogado defensor particular.
El tribunal estará integrado por los jueces Martín Pérez (presidente), Javier Araníbar y Leonardo Gabriel Feans, de la Sala I del Tribunal de Juicio.
Por el Ministerio Público participará la fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos (UDEC), Ana Inés Salinas Odorisio. La defensa de Cositorto estará a cargo de Franco Rodolfo Tolaba, mientras que los demás acusados serán representados por el abogado Fernando Díaz Zabalaga.
La causa se originó en 2022, cuando decenas de ahorristas denunciaron haber sido víctimas de estafa por parte de Generación Zoe, que operaba en Salta bajo un esquema de inversiones fraudulentas.
Según la investigación, la firma prometía rentabilidades mensuales de entre el 7,5 % y el 10 %, con retornos anuales de hasta el 120 %.
Al día siguiente de abonar la membresía, el usuario veía reflejado en su perfil online de Zoe un incremento del 20 % en su capital, en concepto de bonificación educativa.
Es decir, si una persona invertía 500 dólares, en 24 horas figuraba en la plataforma que poseía 600 dólares.
El contrato rubricado tenía una duración de tres años, período en el cual el inversionista recién podía retirar su capital. En caso de solicitar un retiro anticipado, se aplicaba una multa del 50 % del monto invertido, sin posibilidad de retiro antes de los 12 meses.
Además, para incentivar la inyección de dólares en el circuito, la plataforma virtual de Generación Zoe premiaba con comisiones a quienes referían nuevos inversionistas. Cuantas más personas ingresaban, mayor era la comisión recibida.
Sin embargo, los beneficios no provenían de actividades reales, sino de los fondos aportados por nuevos inversores, en un esquema piramidal.
El proceso judicial buscará determinar las responsabilidades penales de los acusados en una de las estafas financieras más resonantes de los últimos años en Argentina.
Cositorto ya fue juzgado en Goya, provincia de Corrientes, en un juicio que comenzó en octubre de 2024 y se llevó a cabo en el Tribunal de Goya, donde enfrentó una acusación similar a la de Salta y fue declarado culpable de los cargos.
El empresario había sido detenido en República Dominicana en abril de 2022, tras permanecer prófugo.
