La Policía bonaerense logró capturar al cuarto joven acusado de participar en el violento intento de robo que terminó con la muerte del pequeño Thiago Correa, de 7 años, y de uno de los presuntos delincuentes, Brandon Corpus, de 18. La detención se produjo este miércoles en Ciudad Evita, La Matanza, cuando efectivos identificaron al sospechoso caminando por la vía pública.
El joven aprehendido fue identificado como Joaquín López Otto. Según fuentes policiales, López Otto había logrado escapar durante el tiroteo ocurrido la semana pasada, en el que el efectivo de la Policía Federal, Facundo Aguilar Fajardo, disparó once veces tras ser abordado por los cuatro jóvenes. Desde ese momento, el joven se mantenía prófugo.
La captura tuvo lugar luego de que el Grupo Táctico Operativo (GTO) obtuviera información sobre su presencia en el barrio Villegas. Un oficial vestido de civil que circulaba en su automóvil particular lo vio sobre la calle 900, en la intersección con avenida Central, y procedió a detenerlo. El fiscal de Homicidios de La Matanza, Diego Rulli, dispuso su traslado a una sede judicial, donde será indagado en las próximas horas.
Los otros tres acusados son Uriel Alexis Montenovo y Uriel Emanuel Leiva, ambos de 21 años, quienes resultaron heridos durante la balacera, además del fallecido Brandon Corpus. Todos están imputados por tentativa de robo. Por su parte, el oficial Aguilar Fajardo, de 21 años, fue imputado por el homicidio de Corpus bajo la figura de “exceso en la legítima defensa” y por el de Thiago bajo la calificación de “homicidio simple con dolo eventual”, una figura penal que contempla penas de entre 8 y 25 años de prisión.
La investigación sostiene que el efectivo, a pesar de defenderse de un posible robo, debía prever que el uso de su arma reglamentaria de forma reiterada en una zona urbana transitada podría haber generado consecuencias fatales. El niño, ajeno al enfrentamiento, fue alcanzado por uno de los disparos y falleció más tarde, lo que derivó en un cambio de la imputación original contra el agente, quien permanece detenido mientras se define su situación judicial.
Aguilar Fajardo ya declaró dos veces ante la fiscalía. En su defensa, sostuvo que actuó exclusivamente para protegerse y proteger a su madre, afirmando que no vio al menor al momento de disparar debido a la oscuridad del lugar. “Lo único que quería era que se fueran. No vi al nene, estaba focalizado en los agresores”, dijo el oficial, quien insiste en responsabilizar a los atacantes por la tragedia ocurrida.