Leandro Luis Tulia, acusado de abuso por al menos cuatro mujeres, entre ellas la medallista olímpica en París 2024 Eugenia Bosco, fue detenido este lunes en Vicente López. La regatista bonaerense, de 27 años, lo denunció en enero pasado por un episodio que presuntamente pasó cuando ella tenía 12.
La detención fue realizada por la DDI de la Provincia de Buenos Aires en Avenida del Libertador al 2.800, a unos cientos de metros del Yacht Club de Olivos donde daba clases.
La deportista que en los últimos Juegos Olímpicos ganó la medalla plateada en la clase Nacra 17 de vela junto a Mateo Majdalani y que fue abanderada de la delegación argentina en la ceremonia de clausura de esa competencia realizó la denuncia en la Unidad Fiscal Especializada (UFE) en Violencia de Género de Vicente López, a cargo de Lida Osores Soler.
A partir de su presentación, al menos tres mujeres más se acercaron espontáneamente a relatar episodios similares que vivieron con la misma persona, que fue licenciado de su cargo por el club náutico, con goce de sueldo.
Bosco reveló su caso en una entrevista con La Nación. «Sucedió cuando era muy chica, o sea, cuando estaba navegando en Optimist. No sé cómo explicarlo, pero fue algo que pasó, que no lo controlé, tenía 11 ó 12 años y lo aparté de mi vida hasta hace un par de años que lo pude ver, trabajando obviamente y con gente acompañándome”, manifestó.

En ese sentido, agregó: “Lo pude volver a mi mente y arrancó otro proceso. Yo sabía que había algo en mí, no sabía de dónde venía, pero sabía que había algo. Y cuando esto vino empecé a entender un montón de cosas».
«Es una edad en la que empezás a clasificarte a campeonatos, a viajar sola, a tener un grupo donde te mezclás mucho”, comentó la deportista que venía desde San Pedro “todos los fines de semana”, a veces con su hermano Santiago, dos años mayor y con el que llegó a disputar un Mundial en 29er, otra categoría juvenil, y a veces sola.
Tula estaba a cargo de la enseñanza en el Yacht Club de Olivos desde hace dos décadas e incluso vivía dentro de sus instalaciones. Y durante los fines de semana, algunos alumnos se quedaban a dormir para optimizar el tiempo de aprendizaje.
“Éramos un grupo grande que se quedaba a dormir en el mismo lugar, todos bajo el cuidado de esta persona. Era un pequeño mundo”, graficó Bosco.
Las posteriores denuncias de otras tres mujeres entregaron detalles que involucrarían desde masajes hasta tocamientos no consentidos.
«Pasé por mil etapas de vergüenza, de no aceptarlo, de pensar que yo era la culpable. Después de un tiempo lo puse en la mesa y dije: ‘Yo era chica, no tenía el control de esta situación’”, lamentó Bosco.
Al momento de la denuncia, el abogado de Tula, Daniel Marino Mazzocchini, negó los hechos y dijo que su cliente era inocente.
“Datan de hace mucho tiempo, están prescritos, por lo que la causa naturalmente va a desenvolver en un sobreseimiento. No son abusos que revistan una entidad suficiente para generar un escándalo”, sostuvo en aquella oportunidad al mismo medio.
Ahora, tras su detención, Tula será indagado por la fiscal Osores Soler.
ES