Cada 10 de marzo se celebra el Día Internacional de la Peluca, una efeméride originada en Dinamarca para reconocer el uso de pelucas por diversas razones.
Cada 10 de marzo se celebra el Día Internacional de la Peluca, una jornada que celebra el uso de este accesorio tan versátil. La propuesta de esta fecha nació en Dinamarca, impulsada por Temashop, un negocio dedicado a la venta de disfraces y accesorios. Aunque pueda parecer una efeméride inusual, su propósito es otorgar reconocimiento a las pelucas, utilizadas tanto por razones estéticas como por personas que enfrentan enfermedades que provocan la pérdida de cabello.
¿Cómo y por qué surgió el Día de la Peluca?
El Día Internacional de la Peluca fue concebido para ofrecer un espacio de diversión y conciencia sobre el uso de las pelucas. Además de ser un accesorio popular en celebraciones y fiestas, las pelucas también cumplen un papel importante para quienes las usan debido a tratamientos médicos como la quimioterapia o como parte de un cambio de look. Según el sitio Día Internacional De, la jornada busca resaltar la importancia del uso de pelucas y la forma en que contribuyen a la autoestima y la identidad de las personas.
Historia breve de las pelucas
Las pelucas tienen una larga historia, remontándose a las antiguas civilizaciones egipcia, fenicia y asiria. En el Japón tradicional, las pelucas conocidas como «katsura» también tienen un importante valor cultural. Hoy en día, las pelucas continúan siendo un símbolo de cambio y estilo, además de ser una herramienta esencial para muchas personas en situaciones difíciles, como la pérdida de cabello por tratamiento médico.
Cómo celebrar el Día Internacional de la Peluca
Los interesados pueden unirse a la celebración del Día Internacional de la Peluca siguiendo el hashtag #InternationalWigDay en redes sociales. Muchas personas aprovechan la ocasión para compartir fotos con pelucas, tanto para diversión como para generar conciencia sobre la pérdida de cabello causada por enfermedades y tratamientos. La jornada invita a añadir un toque de alegría a la vida cotidiana y, a la vez, a recordar la importancia de apoyar a quienes atraviesan momentos difíciles debido a la pérdida de cabello.