El juez Luis Giorgetti dispuso que el acusado cumpla detención domiciliaria con tobillera electrónica, pese a la oposición de la fiscalía que pidió mantener la prisión preventiva.
En una audiencia realizada hoy, el juez de garantías Luis Giorgetti decidió otorgarle prisión domiciliaria a D.V, imputado por el homicidio de Ernesto Omar Canales, ocurrido el pasado 25 de diciembre en el barrio Alto de Centenario.
La medida fue solicitada por la defensa oficial, que ofreció una vivienda adecuada para el cumplimiento de la detención y el uso de un dispositivo electrónico de control (tobillera). La fiscal del caso, Silvia Moreira, se opuso al cambio, argumentando que persisten riesgos de entorpecimiento de la investigación y de no sometimiento al proceso.
El magistrado no avaló la postura de la fiscalía y modificó la medida cautelar de detención en comisaría por arresto domiciliario, con la prohibición al imputado de acercarse a menos de 200 metros o contactar por cualquier medio a los familiares que estuvieron presentes el día del homicidio.
Según la investigación del Ministerio Público Fiscal, el hecho ocurrió durante una reunión familiar por Navidad. Durante una discusión, D.V habría invitado a su hermanastro, Ernesto Canales, a salir a la calle, donde le disparó con un arma calibre 22 en el tórax. Canales falleció en el lugar, y horas después el imputado se entregó en una comisaría.
El delito que enfrenta D.V es homicidio agravado por el uso de arma de fuego, en carácter de autor, según lo establecido en los artículos 80 y 45 del Código Penal. La prisión preventiva había sido dictada inicialmente por el juez Cristian Piana por un plazo de cuatro meses.