Marcando un crecimiento exponencial en cada una de sus presentaciones, Duko sigue reafirmándose como el líder de un movimiento que cambió la escena global. Con nuevos hits, himnos que trascendieron fronteras y su presencia imponente sobre el escenario, el argentino nos invitó a ser parte del universo de su álbum “AMERI” dando hoy significado más que nunca a su gran creación artística y personal.

Anoche, en la primera fecha, el Movistar Arena fue testigo de la pasión y lealtad que este artista provoca en el público, con seguidores llegados desde todo el país y países vecinos, armando una previa en las inmediaciones desde el jueves para compartir este sentimiento único que despierta el artista más convocante, y más cuando se lo puede disfrutar en suelo nacional.
Con más de 350.000 entradas vendidas en las primeras horas, con visitas programadas a 15 países, agotando funciones y añadiendo fechas alrededor del mundo, “WORLD TOUR” es mucho más que la presentación oficial de un álbum, es una etapa bisagra en la carrera de Duki, que abriendo plenamente su alma en este proyecto se convirtió en la voz de millones de personas y en el referente de toda una generación.
Con una puesta envolvente de alto nivel escenográfico, audiovisual y sonoro, transmitiendo a la perfección esta emoción tan fuerte y autobiográfica de su disco AMERI, Duki hizo temblar la tierra generando un pogo increíble que se contagió hasta el último rincón del lugar.
Duki ha llenado algunos de los estadios más emblemáticos del mundo, y aunque sin dudas el éxtasis de esos shows es irremplazable, la cercanía y conexión que se logra en recintos como el de Villa Crespo hará que estas seis fechas sean perfectas, pudiendo disfrutar de sutilezas y detalles únicos.

“Nueva Era”, “Brindis” y “Constelación” son algunas de las canciones de “AMERI” que dieron vida a un ritual colectivo maravilloso, replicando en miles de personas la historia de este joven que soñó alguna vez con ser cantante y hoy convoca multitudes.
En “Barro”, el trapero no pudo contener la emoción al escuchar al público corear la icónica frase de Spinetta: “Si no canto lo que siento, me voy a morir por dentro”. Durante “Ticket”, el Movistar Arena se iluminó con los destellos de los flashes, creando una atmósfera única mientras el público acompañaba la canción. Además, invitó al escenario a Iván, un fanático que había conservado una entrada de uno de los primeros shows del artista, para interpretar juntos “Hitboy”.
Además, “Givenchy”, “Rockstar” y “She Don’t Give a Fo” fueron coreadas por una marea humana, entre otros hits que ya la gente siente tan propios que emociona. “Malbec”, “Si me sobrara el tiempo” y “No me llores” formaron parte también de una lista de temas imbatible.