Política 3D – En el marco de la actualidad de la economía de Argentina, el gobierno nacional anunció una significativa disminución en los impuestos de importación para productos textiles y calzado, con el propósito de reducir los costos en el mercado interno. La medida, difundida por el titular de la cartera económica, Luis Caputo, apunta a aliviar el impacto de los elevados precios que afectan tanto a los consumidores como a los comerciantes.
De acuerdo con la nueva normativa, los gravámenes para prendas de vestir y calzado se reducirán del 35 % al 20 %, mientras que los aranceles sobre las telas bajarán del 26 % al 18 %. En el caso de los hilados, la reducción alcanzará hasta el 16 %, dependiendo del tipo de material.
Asimismo, Caputo justificó esta iniciativa resaltando que la Argentina posee algunos de los precios de indumentaria más altos a nivel global. Un análisis comparativo reveló que una remera en el país es un 310 % más cara que en España y un 95 % más costosa que en Brasil. En el caso de una campera, su valor es un 174 % superior al de España y un 90 % mayor al de Brasil.
Este recorte en los aranceles forma parte de un plan gubernamental más amplio para incentivar la competitividad y mitigar la inflación. En febrero, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) reflejó un incremento de solo el 0,4 % en vestimenta y calzado, favorecido por la temporada de descuentos. No obstante, se prevé un aumento en marzo con el inicio de la nueva colección.
Efectos en el sector y desafíos a futuro
Si bien la medida busca abaratar los productos importados y dinamizar la oferta en el sector textil, algunos referentes de la industria advierten que la inflación y la estabilidad del tipo de cambio seguirán siendo factores determinantes en la formación de precios. Además, la carga impositiva y los costos de fabricación local continúan afectando la rentabilidad del sector.
Desde la industria textil, empresarios y comerciantes han expresado inquietudes sobre el impacto de esta reducción arancelaria en la producción nacional. Mientras algunos temen que la competencia con productos extranjeros perjudique a la manufactura local, otros consideran que esta medida podría revitalizar el mercado.
Ricardo Arriazu advierte sobre la flotación del dólar y sus posibles consecuencias
Mientras el gobierno nacional avanza con políticas para frenar la inflación y reducir costos, el economista Ricardo Arriazu lanzó una advertencia sobre el esquema cambiario que podría implementarse en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Durante una exposición en el Jockey Club de Buenos Aires, Arriazu sostuvo que el FMI pretende imponer un modelo de flotación del dólar similar al aplicado en 2018, lo que podría generar inestabilidad en la economía nacional. «Si implementan una flotación restringida como la de 2018, habrá complicaciones», aseveró el consultor.
A su vez, el especialista explicó que la estabilidad financiera en Argentina depende del control de sus dos monedas de referencia: el peso y el dólar. Desde su perspectiva, liberar el tipo de cambio sin antes haber consolidado el sistema financiero podría desencadenar una fuerte volatilidad y un escenario de crisis.
Arriazu también cuestionó la postura del FMI y su falta de comprensión sobre el carácter bimonetario del país. «Si Argentina hubiera liberado el tipo de cambio en diciembre pasado, con una deuda de importaciones impagas de 40 mil millones de dólares y reservas netas en rojo, habríamos entrado en una hiperinflación de inmediato», advirtió.
Un modelo económico en evolución
La disminución de aranceles en el sector de la indumentaria marca un nuevo capítulo en la política económica del Gobierno de Javier Milei, en su afán por reducir costos y estimular la competitividad. Sin embargo, el desafío de estabilizar la economía argentina persiste, especialmente en lo relacionado con el mercado cambiario.
Economistas como Arriazu advierten sobre los peligros de una flotación del dólar sin el debido respaldo, mientras que el sector textil analiza el impacto de estas modificaciones en la industria local. En este contexto, la política económica de Argentina sigue generando debate y expectativas sobre su efectividad para frenar la inflación y recuperar el poder adquisitivo de la población.
Este artículo, publicado por Política 3D, ofrece un análisis detallado sobre los cambios en la economía de Argentina y su impacto en el sector productivo y financiero.
