Tendrá que ser por las malas; así lo decidió el juez de familia de Santa Fe. Un hombre de esa provincia que debe cuotas alimentarias a la madre de su hija fue castigado de forma categórica: le suspendieron la cuenta de banco y de teléfono, le revocaron la licencia para conducir y le prohibieron ser espectador o participar de competencias automovilísticas en varias provincias. Además, se le impidió salir del país y se lo inscribió en el registro de deudores de cuota alimentaria. Quedará en esa situación hasta que regularice su situación.
«No entiende que lo que está en juego es la vida de su hija y no el problema que él tiene con la progenitora. Tiene que pagar lo que debe y demostrar cómo va a seguir», así definió el caso el juez de familia Marcelo Escola, del departamento judicial de San Lorenzo, una localidad pocos kilómetros al norte de Rosario. La cuestión es que a su juzgado llegó este caso, el de un hombre que mantiene deudas de cuota alimentaria con la madre de su hija. Las identidades de los tres no trascendieron, pero sí algunos pormenores.
Por ejemplo, que el hombre en cuestión es aficionado al automovilismo. Y ese detalle no pasó desapercibido para el juez Escola, que aplicó la máxima: por donde más le duele.
Resulta que la expareja del hombre denunciado y madre de su hija aseguró que no sólo él asiste con asiduidad a carreras en distintos autódromos de la provincia santafesina, y de Buenos Aires y Córdoba, sino que incluso habría estado preparando un auto de su propiedad para poder usarlo en las carreras. Es decir, quería competir como piloto de automovilismo. Así lo denunciaron, además, las abogadas en representación de la madre de la hija del hombre denunciado, Florencia Formini y Luisina Flores Piazza.
«Que le moleste»: la explicación del juez
Por donde más le duele, entonces. Escola dictó una serie de medidas que se concretaron en el inicio de esta semana y que estarán vigentes hasta que el denunciado se ponga al día: ordenó que se le suspenda la cuenta de telefonía y que la empresa que le presta servicio no pueda otorgarle otra línea; también que se le bloquee la cuenta bancaria a su nombre; y que se le revoque la licencia de conducir.
Los tribunales de San Lorenzo, Santa Fe, en donde se sancionó a un deudor alimentario: le sacaron el carnet de conducir, le prohibieron las carreras automovilísticas y le cortaron el teléfono, entre otros castigos.Y más aún: el juez labró un oficio remitido a la Federación de Automovilismo de las Provincias de Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, con el objetivo de notificarla respecto de que el hombre se encuentra inhabilitado para asistir como espectador o participante de cualquier competición de la organización.
Mientras tanto, además, permanecerá inscripto en el Registro de Deudores Alimentarios Morosos y no podrá salir del país.
En su caso, la madre de la menor había denunciado incumplimiento de la cuota alimentaria por su parte, cuota que había sido fijada en un 10 % de la canasta de crianza que establece el Indec para la categoría de niños de 6 a 12 años.
La mujer destacó el grado de vulnerabilidad en que se encuentra su hija y que ella misma está desempleada, así como que el padre de la niña tiene un taller mecánico.
«Cuando tomamos contacto con el entorno de sus actividades deportivas, nos enteramos de que presuntamente corre en automovilismo regional y que tiene un taller. Tomamos las medidas a efectos de que le molestara y empiece a cumplir, que es lo que tenemos que lograr. Evidentemente tiene posibilidades de cumplir si realiza estas actividades», explicó el juez Escola al programa «De boca en boca» de Radio 2.
Y sobre el perfil típico del deudor alimentario, que pareciera tener definido en su rol de juez de familia, argumentó: «Muchas veces son actividades propias, hobbies o de entretenimiento las que realiza en desmedro de la calidad de vida de sus hijos».
