Miss Universo 2025 será la edición que selle una década que comenzó con una fuerte pisada de Latinoamérica en el concurso de belleza por excelencia en el mundo.
Miss Universo 2005, quedó en Canadá, pero a Natalie Glebova le siguieron cuatro latinoamericanas: Cynthia Olavarría (Cuba), Renata Soñé (República Dominicana), Laura Elizondo (México) y Mónica Spear (Venezuela).
Hoy en día, todas ellas tienen entre 42 y 43 años y siguen siendo modelos representativas de sus respectivos países. A excepción de Spear, quien en 2014 fue asesinada en un crimen brutal.
Un asesinato que marcó la escena de la moda en los ’10
La maracaibera tenía tan solo 20 años cuando la eligieron Miss Venezuela 2004. De ahí obtuvo la llave para representar a su país al año siguiente, también en Tailandia, donde en unos días su par venezolana, Stephany Abasali, desfilará como una de las grandes candidatas.
Miss Universo 2005 le abrió puertas en el espectáculo local: se convirtió en actriz protagónica de telenovelas y, con el tiempo, en una figura de relevancia mediática a nivel nacional.
Cuando despertó en la mañana del 6 de enero de 2014 no sabía que su nombre acapararía las tapas de los diarios del día siguiente: a sus 29 años le arrebatarían la vida en un asalto que conmocionaría al mundo.
Spear fue Miss Venezuela 2004. Foto: EFEA eso de las 10.30 de la noche, Spear, su esposo Thomas Henry Berry, de 39 años, y su hija Maya, de 5, fueron interceptados por una banda de delincuentes mientras iban en auto en el kilómetro 194 de la autopista Valencia-Puerto Cabello, en el estado de Carabobo, en Venezuela.
Volvían a Caracas después de que su auto se averiara al golpear un objeto puesto intencionalmente en una vía.
Mientras aguardaban a que la grúa de auxilio hiciera su trabajo, al menos seis personas los rodearon. Se resistieron e intentaron protegerse bloqueando las puertas del vehículo, pero la banda no dio tregua: dio inicio a la brutal balacera.
Spear recibió tres balazos (en un brazo, glúteo y pierna) y Berry, uno (en el pecho). Murieron en el acto. Maya, aunque fue impactada por una bala en la pierna, sobrevivió.
Mónica Spear tenía 29 años. Vivía en EE.UU. Foto: AFPLos atacantes huyeron sin lograr robar las pertenencias de la familia, ya que las víctimas fueron halladas con sus objetos de valor dentro del vehículo. Los dos operadores de la grúa lograron huir durante el tiroteo y alertaron a las autoridades en un puesto policial cercano.
El caso que paralizó a un país
Los cadáveres fueron trasladados a Caracas. El matrimonio fue velado dos días después ante cientos de personas en la Capilla Monumental de La Guairita. El día 10 de enero los sepultaron juntos en el Cementerio del Este de la capital venezolana.
El pueblo venezolan pidió justicia por Spear y su marido el 8 de enero de 2014. Foto: AFPEl caso, que para entonces había ocupado la atención pública, provocó la pronunciación del presidente Nicolás Maduro. El mandatario lo condenó como una “masacre” y, en consecuencia, anunció un plan nacional de pacificación. Las autoridades asignaron fiscales especiales al caso y desplegaron operativos policiales para capturar a los responsables.
El día previo al entierro, la policía ya había identificado a siete sospechosos por presunta participación y confirmado el móvil como robo frustrado. Mientras, otros cuatro implicados -entre los cuales se encontraba el portante del arma homicida- seguían prófugos.
Una manifestación por Spear y Berry en Venezuela. Foto: REUTERSLa búsqueda de los prófugos trascendió fronteras. El 21 de marzo, el ministro del Interior de Ecuador informó que cinco ciudadanos venezolanos (tres hombres y dos mujeres, de 16 a 20 años) fueron detenidos en el cantón Pedro Carbo, provincia del Guayas, por su posible vinculación con el asesinato de Spear y Berry.
Detenidos y más violencia
Ocho meses después se registraron las primeras condenas. Un tribunal de Puerto Cabello condenó a tres hombres, de 18, 19 y 23 años, luego de que estos confesaran su participación en el ataque. Les cupo una pena por homicidio intencional calificado, homicidio calificado en grado de frustración (por el atentado contra la hija de 5 años), obstrucción de vía pública, robo agravado y asociación para delinquir.
Para entonces, el caso ya contaba con al menos 10 detenidos (incluyendo a los confesos) y se preparaban nuevos procesos judiciales.
El crimen tuvo 11 condenados. Foto: AFP Con la detención de un onceavo sospechoso practicamente un año después de las primeras condenas, la Justicia completó el desmantelamiento de la banda completa. El último prófugo, al igual que varios de los anteriores, terminó confesando.
La historia guardaba un giro más de violencia: uno de los detenidos que aguardaba el juicio, “Adolfito” Rico Agreda, fue asesinado a puñaladas en su celda por dos que también estaban implicados en el crimen. Tenía 27 años.
Todos los miembros de la banda, los once, fueron condenados con penas de entre 4 y 30 años de prisión. Las más largas -lo máximo posible en Venezuela- fueron para los coautores del asalto: Alejandro Jesús Maldonado Pérez (“El Feo”, 23 años), Franklin Daniel Cordero Álvarez (“El Mancha”, 30) y Leonar Danilo Marcano Lugo (“El Gordo Danilo”, 34).
El 21 de noviembre cuando se celebre Miss Universo 2025 Venezuela estará atenta al legado de una figura que dejó una huella perpetua en el ambiente a pesar de haberse ido temprano.






