La interna oficial
Sandra Viviana Pettovello está enojada. La ministra de Capital Humano tiene pendiente una charla con su amigo personal, el Presidente. Es que Javier Gerardo Milei no la incluyó, hasta ahora, en la mesa política que se armó tras la crisis que provocó la paliza electoral del 7 de septiembre en las elecciones bonaerenses.
La «excusa» que le dieron a la vehemente ministra es que este gobierno tiene tres aristas: gestión, política y batalla cultural. Y que a ella le toca la gestión, en la que el jefe de Estado la considera como un baluarte. Pero luego de ser marginada de la conformación inicial de la mesa de decisiones sobre el rumbo futuro del gobierno nacional, la funcionaria se mostró activa públicamente: se reunió a solas con el poderoso sindicalista de la construcción Gerardo Martínez, pero la foto la divulgó ella misma en sus redes sociales.
También recibió a directivos de IDEA y les confirmó que irá al encuentro anual de esa cumbre empresarial; se vio con el ministro de Desarrollo Humano de la Ciudad, Gabriel Mraida, y conversó con Martín Rapallini, el titular de la UIA, quien habló de la difícil situación del sector industrial en estos tiempos mileístas. Y coronó su alto perfil firmando un convenio para centro de familia en Mar del Plata, donde se fotografió con Guillermo Montenegro, el intendente de General Pueyrredón y quien ganó la Quinta Sección Electoral, uno de los pocos que salió victorioso del complicado 7S para el Gobierno.

«Javier me va a escuchar», soltó la ministra al saber que no era tenida en cuenta en las decisiones políticas que, ahora, toma el propio Javier Milei, inseparable como siempre de su hermana Karina, y con Santiago Caputo re empoderado tras la derrota provincial y autor del discurso por cadena, junto al mandatario. Pettovello adjudica los males políticos que le tocan con los mismos que la «operaron» meses atrás, cuando se hacía circular desde oficinas gubernamentales que sería candidata a diputada nacional en las elecciones de octubre. Y por eso, evita criticar a la propia Karina pero sí señala a los Menem y a Sebastián Pareja, el armador bonaerense.
Quienes hoy miran con desconfianza al curtido Pareja dicen que el hombre se puede transformar en algo peligroso para «La Libertad Avanza». «El tipo ya tiene 11 diputados y senadores propios en la provincia de Buenos Aires, ya se armó su propia tropa», rezan quienes ven que el ex peronista juega su juego y no, el que le conviene al Gobierno nacional. Mientras tanto, decisiones como la del armador de sumar a la mesa bonaerense a un candidato perdedor, como Maximiliano Bondarenko -el ex comisario derrotado holgadamente en la Tercera Sección Electoral- han sido contrapuestas ahora con la incorporación de Oscar Liberman, el otro vencedor de LLA en la compulsa provincial, en este caso en la Sexta Sección. Fuerzas del Cielo agitadas…

Conurbano caliente
En tanto, el gobernador Axel Kicillof se ha mostrado con alto perfil mediático y coronó una agitada agenda post victoria en las elecciones desdobladas participando de la marcha universitaria de este miércoles, lo que hizo recordar a sus tiempos de militante universitario en la agrupación TNT (Tontos pero no Tanto) y también de exigente docente de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA. Ahora, el mandatario bonaerense convocó a todos los intendentes peronistas de la Provincia a un encuentro el próximo viernes, en un gremio de la localidad de Ensenada, donde gobierna el axelista Mario Secco.
La idea de Kicillof es mostrar que «los intendentes peronistas van a bancar a Jorge Taiana», el primer candidato a diputado nacional del «Frente Patria» para el 26 de octubre, ante el rumor bien fundado de que varios no van a estar presentes en la campaña por los legisladores nacionales.
Varios de ellos ya están midiendo con encuestas en sus distritos para ver ya cómo viene la elección de octubre y ver qué les conviene. «Yo por Grabois, Yasky y la piba de Necochea de Massa, no me voy a calentar», rezongaba un alcalde que cuidó su comarca celosamente el 7 de septiembre y no le interesa trabajar para la lista de diputados que armó Cristina Elisabet Kirchner, sin incluir allí a un solo intendente.
Por otra parte, los ministros de la Provincia están pensando en una pelea que se les viene y que es el capítulo del Presupuesto provincial, con una Legislatura que termina y una que arranca. Allí, volverá otra vez a cobrar fuerza el capítulo de las re-reelecciones de los intendentes y de los diputados y senadores bonaerenses. Rendirse, jamás…

Che, Milei
Cristina Kirchner sigue cumpliendo con su detención domiciliaria en su departamento de San José 1111, en el barrio porteño de Constitución, pero recibe visitas continuamente de políticos de su estricta confianza pero también aplicó la «tabula rasa», como por ejemplo con Juan Manuel Abal Medina, como reveló el periodista Federico Mayol en Infobae.
Quienes la han visto en el último mes destacan el ambiente de un departamento muy luminoso donde se ve una cinta para correr y caminar, que fatiga la ex Presidenta, haciendo mucho ejercicio. CFK muestra dos facetas a sus visitantes: una fuerte preocupación por el tema económico y un enojo irreductible con Axel Kicillof.
La ex jefa de Estado -condenada por la causa Vialidad- está muy molesta y distanciada con el gobernador bonaerense, y considera el origen de esa inquina al momento en que Kicillof no la apoyó como presidenta del PJ, siendo prescindente cuando también se había postulado para ese cargo el gobernador riojano Ricardo Quintela.
Cristina se muestra muy encima de todo lo político y repite una frase: «No puedo creer lo que pasó con Alberto Fernández», mostrándose también enojada con el ex Presidente, como si no tuviera responsabilidad alguna con esa etapa de gobierno del «Frente de Todos», período en el que fue Vicepresidenta, del primer al último día. Todas, todos y todes…
