El Gobierno evalúa hacer un cambio en el organigrama como respuesta al impacto que tuvo el escándalo de los audios atribuidos a Diego Spagnuolo, desplazado de su cargo al frente de la Agencia Nacional de Discapacidad. Fuentes oficiales dejaron trascender desde la Casa Rosada que el ente que quedó bajo sospecha de supuestas coimas dejaría su status de organismo descentralizado para depender directamente del Ministerio de Salud.
De concretarse, la medida implicaría el primer abordaje directo a las consecuencias del caso, más allá de la salida de Spagnuolo. Y significaría también un avance del ministro Mario Lugones, que expande su órbita de influencia. La idea del cambio se dejó correr el mismo día que el funcionario se ausentara en una convocatoria que le llegó desde la Cámara de Diputados por el mismo tema.
Lugones llegó al cargo con el impulso del asesor presidencial Santiago Caputo. La ANDIS, que supo depender de Jefatura de Gabinete, tuvo hasta ahora la injerencia de los leales de Karina Milei, en especial de Eduardo «Lule» Menem, ambos mencionados en los audios que derivaron en causa judicial.
La ANDIS se creó en 2017, a través del decreto 698. Se encontraba dentro de la órbita de la Secretaría General de la Presidencia, pero se trataba de un organismo descentralizado con autarquía económico financiera y personería jurídica propia.
El 11 de diciembre de 2023, el decreto 8 ya disponía su paso a la órbita de Jefatura de Gabinete de Ministros. En julio de 2024, el decreto 585 la traspasó al Ministerio de Salud, en la misma normativa que creó el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado.
Tras el estallido del escándalo, el Gobierno primero desplazó a Spagnuolo como titular de la agencia y luego intervino la ANDIS, donde colocó a Alejandro Vilches. Ahora busca quitarle su facultad de organismo descentralizado.
En el Ejecutivo descuentan que no habrá impedimentos legales para hacer el cambio de organigrama. Una espada legal de LLA estimó que aunque revestía como organismo descentralizado en los hechos «ya estaba bajo el control» de Salud. «Sí, era descentralizado, pero dependiente de Salud», insistió, más allá de las internas.
DS