La flexibilización de la barrera sanitaria impactó en la relación comercial con Chile. El país trasandino suspendió la importación de carne y productos de origen animal provenientes de la Patagonia, tras dejar sin efecto el reconocimiento sanitario que, por más de 15 años, le permitió a esa región exportar con un sello de calidad diferencial: zona libre de fiebre aftosa sin vacunación.
La medida fue oficializada por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile a través de la Resolución Exenta N.° 5952/2025, publicada el 30 de julio. Así, el vecino país suspendió las importaciones que hasta ese momento se autorizaban bajo certificación sanitaria especial.
La decisión, según explicaron, responde a un cambio en la normativa interna argentina, impulsado por el gobierno de Javier Milei y motorizado por el Ministerio de Transformación y Desregulación del Estado, que conduce Federico Sturzenegger.
En particular, el conflicto se originó tras la entrada en vigencia de la Resolución 460/2025 del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), que habilita el traslado de carne con hueso de animales susceptibles a fiebre aftosa desde zonas donde se vacuna hacia una región del país donde no se vacuna: la Patagonia.
La normativa se limita a costilla, asado y esternón, excluyendo huesos largos como osobuco o lomo con hueso. No obstante, los especialistas advierten que, incluso con esas restricciones, el riesgo existe.
¿Qué está en juego?
Desde 2008, Chile reconocía a la Patagonia argentina como zona libre de fiebre aftosa sin vacunación. Esa categoría permite exportar productos cárnicos con hueso a países que imponen estrictas restricciones sanitarias, como la Unión Europea, Japón o Reino Unido. El nuevo escenario regulatorio argentino, sin embargo, cambió las condiciones que habían sido evaluadas por Chile en su momento.
- 1,2%
- Es el porcentaje de las cantidades de carne ovina exportada desde la Patagonia en 2022 destinadas a Chile.
Según un informe del Consejo Federal de Inversiones (CFI), en 2022 las exportaciones de carne ovina desde la Patagonia (incluida La Pampa) hacia Chile fueron de 36,6 toneladas por un valor de US$251.162. Ello representaba, respectivamente, un 1,2% y un 1,4% del total exportado de carne ovina desde esa región del país.
En lo que a carne bovina refiere, los envíos desde Argentina hacia el país trasandino se concentran casi totalmente en cortes deshuesados enfriados o refrigerados, según se desprende del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). “No debería haber problemas”, consideró Miguel Gorelik, director de Valor Carne. El impacto de la decisión de Chile no sería, por ende, significativo en términos de exportaciones cárnicas.
Los envíos desde la Patagonia hacia Chile de animales en pie con fines reproductivos (bovinos y ovinos) quedaron también suspendidos. Este intercambio era importante para el mejoramiento genético regional, por lo que la medida representa un golpe para ambos países.
La principal preocupación radica en que decisiones como la de Chile se repliquen en otras regiones del mundo, particularmente en la Unión Europea.