La desaparición de Lian Gael Flores Soraide, el niño de tres años que fue visto por última vez el 22 de febrero de 2025 en un paraje rural de Ballesteros Sud, Córdoba, sumó un nuevo y preocupante capítulo. A ocho meses del hecho, la familia del menor solicitó la detención de dos vecinos luego de que se encontraran en sus teléfonos celulares miles de archivos con contenido de abuso y explotación sexual infantil.
El caso se investiga como un presunto secuestro extorsivo, aunque hasta el momento no hay una hipótesis firme sobre qué ocurrió con el pequeño. Lian desapareció mientras se encontraba en su casa junto a sus padres, Plácida Soraide Colque y Elías Flores Mamani, y sus hermanos. La alarma se encendió cuando su hermana Maribel, de 17 años, notó su ausencia al llamarlo para la merienda. Vestía un pantalón azul y no tenía remera; esa prenda apareció al día siguiente en la puerta de la vivienda.
El hogar familiar, conocido dentro de la causa como “zona cero”, se ubica en el sector denominado cortadero de ladrillos, a tres kilómetros de Ballesteros Sud. En el lugar vivían otras tres familias que también se dedicaban a la producción artesanal de ladrillos. Entre ellas, los R.Z., vecinos directos de los Flores Soraide.

Durante las primeras pesquisas, los investigadores detectaron inconsistencias en los testimonios de dos integrantes de la familia R.Z., de 21 y 16 años. En los allanamientos realizados el 23 de febrero se secuestraron sus teléfonos celulares, cuyos contenidos revelaron hallazgos estremecedores.
Qué encontraron en los teléfonos de los vecinos de Lian Flores
Según los informes de la Unidad de Equipos Móviles del Ministerio Público Fiscal de Córdoba, en el celular LG del menor se detectaron 153.987 archivos y, entre ellos, al menos 40 videos e imágenes de abuso sexual infantil, algunos protagonizados por menores de 13 años. En el dispositivo Samsung Galaxy A35 del mayor de los hermanos se hallaron 65.954 imágenes y 5.783 videos, incluyendo dos archivos de pedofilia.
Aunque los peritos no encontraron indicios de producción ni envío del material desde esos teléfonos, los resultados encendieron las alarmas. Los especialistas aclararon además que el análisis no abarcó la totalidad del contenido debido a limitaciones técnicas, por lo que podrían existir archivos aún sin revisar.

Ante estas pruebas, el padre de Lian, Elías Flores Mamani, junto al abogado querellante Rodrigo Tripolone, solicitó la inmediata detención de los dos vecinos ante el Juzgado Federal de Bell Ville. “Todo este tiempo la justicia tenía elementos suficientes para requerir las detenciones. No solo tenían material de abuso en su poder, sino también contradicciones en sus declaraciones”, expresó Tripolone en diálogo con Infobae.
En paralelo, la fiscal María Virginia Miguel Carmona y la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) pidieron nuevas medidas de investigación, entre ellas un exhorto internacional a Estados Unidos para que Google informe los horarios y la geolocalización de varias cuentas vinculadas a los sospechosos durante los días previos y posteriores a la desaparición.
Además, el Ministerio Público Fiscal solicitó la intervención de la División Interpol de la Policía Federal para verificar si los dos jóvenes figuran en el Registro de Agresores Sexuales o en la base internacional de imágenes y videos sobre explotación infantil (ICSE).