Jimena Barón volvió a hablar sobre su maternidad reciente y lo hizo, como suele ser su estilo, con una mezcla de sinceridad, sentido del humor y consejos útiles. A través de una serie de historias en Instagram, la actriz y cantante compartió detalles de uno de sus hábitos diarios: un jugo antiinflamatorio casero que, según ella misma describió con ironía, “parece comida de tortuga”.

“Buen día. Mi jugo antiinflamatorio parece comida de tortuga, sí”, escribió Barón junto a una imagen en la que se ven los ingredientes del preparado natural: zanahoria, remolacha, cúrcuma, jengibre, limón, apio y manzana verde. “Salud”, agregó en otro video, donde se la ve sosteniendo un vaso con el resultado final: un líquido de color fucsia intenso que toma cada mañana.

Además, la artista mostró el suplemento que acompaña este jugo en su rutina diaria: magnesio, un mineral recomendado para aliviar tensiones musculares y mejorar el descanso. “A ti, mami post parto que te explota la cabeza y la cintura”, escribió en tono cómplice junto a una cápsula del producto, acompañada por un código de descuento para sus seguidoras.

Estas publicaciones se suman a otras que la autora de La Cobra viene compartiendo desde que nació Arturo, su segundo hijo y el primero junto a su actual pareja, Matías Palleiro. Desde entonces, la artista viene mostrando distintas aristas del posparto: desde los momentos caóticos hasta los pequeños hallazgos que la ayudan a sentirse mejor. Fiel a su estilo descontracturado, se muestra sin filtros y conectada con otras madres que atraviesan el mismo momento vital.
Días atrás Jimena respondió la consulta de una seguidora que quería saber cómo se viste para salir con su bebé sin que él pase frío ni ella pierda comodidad. Con su humor habitual, reveló la fórmula que mejor le funciona: “Calza y algún topcito escotado para sacar la teta fácil, ahí le mandás fular y bebé”, explicó.
La prenda clave de esta dinámica es el fular, un accesorio que ya había mostrado en otras publicaciones y que considera esencial para sostener a Arturo pegado a su cuerpo mientras se mueve por la ciudad. “Arriba del fular un saco o sweater grandote con botones (escotado para no ahogar al crío) y campera o saco también abierto arriba. Le pongo un ganchito al escote de la campera para no ir mostrándole el zonpe a todo el barrio”, detalló divertida.