Javier Milei es el Presidente de la Nación y no actúa como. Selecciona a sus enemigos /as y monta escenas públicas que ratifican su desdén por la democracia en su mínima expresión.
En San Isidro se produjo un hecho que no puede ser evaluado como uno de los tantos momentos virales que formatean la des comunicación.
Un grupo de jóvenes a bordo de un Falcón verde, automóvil asociado a los secuestros durante la dictadura y al terrorismo de Estado, borraron días atrás un mural de las Abuelas de Plaza de Mayo en San Isidro. Los autores mostraron su convencimiento, Pipo Paolucci, Mateo Servan, Ian Molina y Agustín Castiglione, aparecen en el video.
«Estamos tapando las mentiras que se dijeron durante años», dice Castiglione en uno de los fragmentos del video. Otro de los participantes afirmó: «La Libertad Avanza de San Isidro vino a corregir la basura que dejaron los zurdos».
Un símbolo de poder subjetivo que tutela el odio como nutriente de la supuesta libertad. Va más allá de las redes sociales. Es algo que ya empezó… y no es un juego virtual.