En un telegrama dirigido a los miembros del Consejo Episcopal Latinoamericano reunidos en Río de Janeiro (Brasil) el pontífice agradeció el «servicio de animación misionera» del organismo.

El papa León XIV dirigió un mensaje a los miembros del Consejo Episcopal Latinoamericano y Caribeño (Celam), reunidos en Río de Janeiro (Brasil), el marco de 40ª Asamblea General Ordinaria, con motivo del 70º aniversario de su fundación.
En un telegrama dirigido al cardenal Jaime Spengler, arzobispo de Porto Alegre y presidente del Celam, el Santo Padre subrayó el carácter colegial del organismo eclesial, entidad a la que definió como «el órgano de contacto, de colaboración y de servicio de las conferencias episcopales de América Latina en la tarea de la evangelización».
León XIV destacó la «urgente necesidad» de recordar que «es el Resucitado, presente en medio de nosotros, quien protege y guía a la Iglesia, reavivándola en la esperanza, a través del amor que ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que nos fue dado».
El pontífice invitó a los obispos latinoamericanos y caribeños a hacerlo especialmente en la actual situación histórica, en la que muchas personas «sufren la tribulación y la pobreza ocasionadas por las continuas crisis a escala continental y mundial».
Asimismo, subrayó la importancia de suplicar a Cristo que fortalezca a la Iglesia «en su misión de salir al encuentro de tantos hermanos y hermanas, para anunciarles el mensaje de salvación de Cristo Jesús y hacerlos partícipes de la alegría que nace del encuentro personal con Él».
El Papa también agradeció al Celam por «el servicio de animación misionera que realiza en esas tierras latinoamericanas» y les pidió orar «al Buen Pastor por mí, para que sea siempre fiel al ministerio en favor de la Iglesia universal que ha querido confiarme».
«A la vez que, invocando la constante protección de Nuestra Señora de Guadalupe, les imparto de corazón la Bendición Apostólica como prenda de abundantes bienes celestes», concluyó León XIV.+