La decisión del Juez Federal de San Martín resultó una demostración del tiempo aplicado en ejercicio del poder que administra. Respetó todos los plazos para emitir un fallo que anticipa su mirada de fondo y que activó la APELACIÓN de la Universidad Nacional de Moreno que ayer presentó ante la Cámara Federal. Hay allí un elemento que difiere sustancialmente del rechazo a la primera cautelar (junio de 2023): ahora juega el Estado nacional, interviene e informa que «jamás existió voluntad de entregar la tierra al Municipio». En ese aspecto la UNM, a través de su representante legal, reitera un concepto vital: «el dominio original del predio en cabeza del Estado Nacional, su afectación por medio del Convenio N° 246/10 – ratificado por el Protocolo Adicional Nº 02/21-, la reserva de la parcela para reubicar usos educativos preexistentes y el acuerdo para la asignación de otros nuevos usos educativos en la porción remanente, tanto a la Universidad como a la misma SENNAF y la Municipalidad una vez reubicados aquellos, responden en su totalidad a actos administrativos firmes y consentidos, y no a cuestiones de hecho que deban acreditarse. Lo mismo sucede con la errada postura del municipio, que basa todas sus pretensiones sobre el predio en normas provinciales inaplicables al objeto de autos y en una inscripción registral manifiestamente nula».
Existe una pregunta central para la Cámara que recibe la apelación, quien debe resolver la cautelar para paralizar la obra o impedir que la estructura de Consejo Escolar se mude al edificio: ¿la sola
registración dominial (el plano del año 2012 que no contempla las instituciones que existen en la actualidad, pero es reconocido por ARBA, gestión Kicillof) es suficiente para definir la cuestión de fondo, cuando el propio Estado Nacional –titular original del inmueble– sostiene su nulidad?
Entre los argumentos resaltamos uno de fácil entendimiento en función de los intereses que tiene la Municipalidad para inaugurar próximamente el Polo Eductivo, y aquel derecho que defiende la UNM:
«La resolución recurrida no pondera adecuadamente la relación de daños entre las partes. Si la medida cautelar es concedida, el único perjuicio para el Municipio será la postergación de sus obras o la eubicación de personal que cumple sus funciones en otras locaciones hasta tanto se resuelva el fondo el litigio. En cambio, si las obras continúan y se concreta la inminente mudanza anunciada para los próximos días, y luego se reconoce la titularidad de la Universidad o del Estado Nacional, el daño será irreparable y de magnitud considerable. El perjuicio causado por la denegación de la cautelar en esta oportunidad es, por lo tanto, mucho mayor que el que se generaría con su otorgamiento. La medida de no innovar busca precisamente evitar que se consolide un hecho consumado que impida la efectiva restitución del bien en caso de sentencia favorable a la Universidad o al Estado Nacional».
Las cartas están en la justicia.
Existe otro poder que se llama Ejecutivo,por donde circula la política. La Provincia de Buenos Aires, gestión Kicillof, firmó este año con la UNM la renovación de un compromiso: adquirir un terreno y construir la Secundaria N° 37, lo que significa reconocer que el inmueble de la calle Corvalán esquina Merlo es de la Universidad Nacional de Moreno.
Su palabra tiene autoridad y peso, también su firma. En caso que el gobierno de Mariel Fernández inaugure la obra en las próximas semanas – nada ni nadie parece detener la marcha – quedarán liberadas aulas que corresponden a lo que podemos llamar la «vieja Escuela Secundaria N° 37» (ese inmueble es ocupado por la SAD que trabajará en el Polo Educativo). Ya no hay que buscar terreno, si evaluar las condiciones de aulas, garantizar excelencia, calidad y espacio digno – seguro para que la escuela 37 no pierda ningún derecho.
Al liberar el edificio de Corvalán y Merlo, la Universidad Nacional de Moreno puede proyectar ahí la Escuela Secundaria Politécnica. Si la casa de altos estudios no logra el financiamiento del Estado nacional la Provincia puede gritar PRESENTE porque lanzó el año pasado un Programa de obras universitarias.
Kicillof es el responsable de la educación en la Provincia de Buenos Aires. El Director General de Escuelas, Alberto Sileoni fue impulsor de la ESPUNM desde el origen mismo de la UNM. En ellos está la llave para salir por arriba, marcando el presente…. mirando el futuro que garantice el derecho a la educación.
Esa acción política no condiciona el proceso judicial (que garantiza años de litigio) y es una forma real, posible y concreta de salir por arriba… de una buena vez.
