Un joven de 24 años que trabajaba en una funeraria murió trágicamente por una tumba de hormigón de 900 kilos que se cayó encima suyo. Inmovilizado desde la cintura para abajo contra el suelo, la ayuda demoró tanto que para cuando fue trasladado al hospital nada pudo salvarlo.
El muchacho que quedó atrapado era Ángel Rojas, esposo y padre de un niño de tres años. Esta noticia devastó a la familia, que se preparaba a festejar el cumpleaños número cuatro del pequeño. La madre expresó su dolor en una entrevista a la WFAA, en las que no pudo contener las lágrimas.
Su viuda, Natalie Rojas, afirmó que evalúa iniciar acciones legales por “negligencia grave”, contra el cementerio y crematorio estadounidense Restland. «Nunca debió haber movido el bloque de hormigón solo», sentenció su abogado.
«Era un padre muy trabajador. Ángel era una persona maravillosa en todos los sentidos», lo definió Natalie. «No sé qué pasó, pero sea lo que sea que haya pasado, nunca debió haber estado allí en soledad», dijo entre lágrimas.
Además, afirmó que su marido «era un trabajador inteligente». «Mi marido conocía el riesgo de un pequeño error y las precauciones que debía tomar en todo lo que hacía».
 La tumba de hormigón pesaba 900 kilos. Cortesía: Familia Rojas
La tumba de hormigón pesaba 900 kilos. Cortesía: Familia RojasDe todas maneras, la empresa ubicada en Dallas, Texas, ofreció toda su cooperación a las autoridades para determinar la causa del accidente. A la vez, se sumaron al dolor familiar: «nos entristece la pérdida de nuestro valioso empleado y de larga trayectoria».
«Su familia y sus compañeros de Restland necesitan nuestro apoyo, y les pedimos que les demos espacio y tiempo para sobrellevar su duelo«, publicaron en sus redes.
Un bloque de hormigón que torturó al joven hasta la muerte
Con el bloque que lo inmovilizó desde la cintura para abajo, Ángel gritaba en auxilio de personas que le quitasen de encima la bóveda funeraria de hormigón. Pero permaneció allí 45 tortuosos minutos hasta que los rescatistas lograron liberarlo.
Los bomberos de Dallas llegaron a las instalaciones de la funeraria, ubicada en Greenville Avenue, en la tarde del último lunes 20 de octubre. Los integrantes de la primera dotación que llegó al lugar intentó levantar el bloque de alrededor de 900 kilos.
 Natalie quedó viuda con su hijo de 3 años, quien está a punto de cumplir años. Foto: Captura WFAA
Natalie quedó viuda con su hijo de 3 años, quien está a punto de cumplir años. Foto: Captura WFAAPara ello utilizaron separadores hidráulicos y bolsas de aire, materiales usados generalmente en accidentes automovilísticos. Ángel fue trasladado al hospital pero desgraciadamente falleció ese mismo día.
Un desgarrador mensaje que llegó a grabar a su esposa
Natalie contó que el joven aceptó el trabajo en el cementerio para «mantener a su familia», luego de que a sus 19 años se convirtiera en padre de Ángel Noel. «Lo que todo hombre quiere es un hogar lleno de amor, y un trabajo que se lo proporcione. Ésas eran sus metas», dijo a WFAA.
La viuda reveló a CBS News que él la llamó mientras estaba atrapado, poco antes de su muerte. Así es como tuvo la oportunidad de escuchar sus palabras finales.
A pesar del insoportable tormento, Ángel logró utilizar su teléfono móvil para pedir ayuda. Esta llegó demasiado tarde, pero en la espera logró llamar a su esposa, con la esperanza de hablar aunque sea por última vez.
Solamente pudo dejarle un mensaje en el buzón de voz, en el que le dijo que «la amaba y que quería irse a casa».





