[GOIÂNIA, SciDev.Net] Año tras año, los países de América Latina baten récords preocupantes relacionados con el cambio climático.
En Chile, los incendios forestales a comienzos de 2024 causaron más de 130 muertes, en lo que fue considerado el mayor desastre del país desde el terremoto de 2010. Poco después, en el sur de Brasil, lluvias intensas inundaron ciudades enteras, afectando al menos a 2,4 millones de personas.
También el año pasado, el río Paraguay, en su recorrido por ese país, alcanzó su nivel más bajo en 60 años, y Venezuela perdió su último glaciar. Por su parte, las islas caribeñas de Granada sufrieron el impacto del huracán Beryl, de categoría cinco considerado el más peligroso jamás registrado en el Atlántico.
Ante estos eventos extremos recurrentes, la mayoría de los latinoamericanos dijo estar preocupado: más del 85 por ciento de las personas incluidas en una encuesta creyó que el cambio climático podía tener efectos negativos en 25 años o menos, y más del 88 por ciento espera que las consecuencias sean graves.
Los resultados de esa encuesta —publicada en un artículo reciente en la revista Nature Communications— se basan en respuestas de 5.338 personas de Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Perú y México —países que, según el estudio, representan más del 80 por ciento de las emisiones de carbono de la región.
Más allá de identificar qué parte de la población latinoamericana está preocupada por el cambio climático, los investigadores buscaron comprender qué factores podrían estar asociados a las percepciones de riesgo frente a este fenómeno.
“Es necesario llevar el tema climático a las conversaciones del día a día, más allá del ‘nicho ambientalista’, usando lenguajes accesibles, regionales y con referencias locales”.
Renata Guedes, Instituto de Tecnología y Sociedad (ITS), Brasil
Las percepciones de riesgo del cambio climático son construcciones subjetivas mediante las cuales las personas comprenden los posibles daños o perjuicios derivados de los cambios en el clima.
Los resultados indican que, en América Latina, esta percepción de riesgo está impulsada más por las emociones que por las ideologías políticas, a diferencia de lo que se observa en estudios similares realizados en países ricos —sobre todo en Estados Unidos y Europa occidental.
El estudio muestra que la preocupación es el factor más importante asociado a la percepción del riesgo climático. En segundo lugar, se ubica la vulnerabilidad al cambio climático percibida por las personas.
Estos factores también ejercen más influencia que los aspectos cognitivos, las visiones culturales del mundo y las normas sociales en la región.
Polarización
Según Guilherme Fasolin, doctorando en Ciencia Política en la Universidad de Vanderbilt (EE.UU.) y primer autor del artículo, la investigación muestra que la polarización política observada en algunos países de América Latina aún no ha llegado al ámbito climático.
“En la práctica, esto significa que la forma en que las personas piensan sobre el cambio climático y sus riesgos en la región aún no se basa en una dinámica de ideología política”, explicó el investigador a SciDev.Net.
Fasolin señala que, para que un tema como el riesgo climático sea percibido como una causa ideológica por la población es necesario que las élites políticas le den ese significado, algo que, en términos generales, aún no ha ocurrido en América Latina.
“La ideología por sí sola es algo un tanto abstracto para la gente. En otras palabras, sin élites políticas que le den sentido a esas ideologías —pensando en temas específicos como el cambio climático y sus riesgos—, probablemente no veremos ninguna división en la región relacionada con cómo las personas se posicionan políticamente”, detalla.
Esto es lo contrario a lo que ocurre, por ejemplo, en Estados Unidos, donde la agenda climática está claramente ligada a la ideología político-partidaria: los demócratas liberales son más favorables a las medidas para combatir el cambio climático, mientras que los republicanos conservadores muestran escepticismo o cuestionan la influencia humana en el calentamiento global.
Diferencias entre países
Aunque el estudio consideró el conjunto de respuestas, los investigadores reconocen diferencias entre los países incluidos en la muestra.
Fasolin cita el caso de Brasil, donde la ideología política puede estar más asociada a la percepción del riesgo climático, en especial por el pasaje de Jair Bolsonaro —una figura política de derecha— por la Presidencia del país entre 2019 y 2022.
“Sí existen efectos de la ideología política, pero son menos intensos que en Estados Unidos”, afirmó a SciDev.Net Renata Guedes, investigadora sénior del Instituto de Tecnología y Sociedad (ITS), de Brasil, que realiza el estudio Cambio Climático en la Percepción de los Brasileños, en colaboración con el Programa de Cambio Climático de la Universidad de Yale y el Ipec Inteligência, un instituto brasileño de investigación de mercado y encuestas de opinión.
Según el último estudio, realizado en 2022 y publicado en 2023, el 85 por ciento de los brasileños que se declaran más a la izquierda del espectro político afirma que la mayoría de los científicos cree en el calentamiento global, frente al 68 por ciento de quienes se identifican con la derecha.
“En Brasil, la ideología puede influir en algunos aspectos de la percepción climática, pero la preocupación generalizada y la confianza en la ciencia siguen siendo elevadas en todos los grupos sociales, lo que refuerza el patrón latinoamericano observado en otros estudios regionales”, añade Guedes.
Comunicación
Para Fasolin, el panorama en América Latina es favorable en la medida en que la agenda climática aún no ha sido capturada por la política partidaria. Comprender este contexto es esencial para diseñar estrategias de comunicación eficaces.
Entre estas estrategias, la investigadora del ITS menciona la necesidad de descentralizar la comunicación, transmitir mensajes con valores compartidos, promover una educación climática transversal y dar visibilidad al consenso científico a través de voces confiables y “influencers climáticos”.
“Es necesario llevar el tema climático a las conversaciones del día a día, más allá del ‘nicho ambientalista’, usando lenguajes accesibles, regionales y con referencias locales”, concluye Guedes.
Este artículo fue producido por la edición de América Latina y el Caribe de SciDev.Net.