Marta Fort, la hija del recordado empresario mediático Ricardo Fort, sorprendió a sus más de 980 mil seguidores con un mensaje cargado de emoción y reflexión en sus historias de Instagram. Con letras blancas sobre fondo negro, la influencer expresó una profunda sensación de soledad y falta de apoyo dentro de su entorno más cercano: “Es inevitable para mí no sentirme en soledad y triste cuando dentro de mi propia familia, la única que me quedó y en la que tendría que encontrar complicidad, hay personas que no quieren verme crecer”, comenzó su descargo.

La publicación, que rápidamente se viralizó, continúa con frases que revelan tensiones internas: “Cuando son las que más necesito que confíen en mi capacidad, que me impulsen. Es doloroso sentir que lo que para mí representa un camino de esfuerzo y compromiso, para otros se convierte en una amenaza o un motivo de conflicto. Y cuando menos conflicto hay, es porque menos cercanía hay”. Finalmente, cerró con una reflexión que resonó entre sus seguidores: “Cuando eso pasa, no hay vida ostentosa ni viaje a Miami que lo tape”.
Este mensaje llega en un momento sensible para Marta. El pasado 5 de noviembre se cumplió el que habría sido el cumpleaños número 57 de Ricardo Fort, una fecha que siempre despierta emociones en sus hijos. En esa ocasión, Marta compartió un video retro de una Navidad junto a su padre y su hermano Felipe, acompañado de un texto donde confesaba sentirse atravesada por una mezcla de felicidad y melancolía: “Hace poco viví muchos cambios que me hicieron sentir, por un lado, muy feliz, pero por otro, en un estado de melancolía, depresión y con dudas constantes”.

Entre esos cambios, Marta mencionó que se mudó, comenzó a involucrarse más en la empresa familiar FelFort y alcanzó logros personales y laborales que jamás hubiera imaginado. Sin embargo, también admitió que hay personas con las que le hubiera gustado compartir esta nueva etapa y que hoy no están a su lado, siendo una de ellas su padre, fallecido en 2013. “A veces me encuentro sola, con miedo, con incertidumbre sobre lo que viene. Son esos momentos en los que más lo extraño, en los que más necesito tener a alguien con quien contar, con quien encontrar mi lugar seguro”, escribió en otro posteo reciente.
El descargo de Marta no solo expone su vulnerabilidad, sino que también deja entrever conflictos dentro del clan Fort. Aunque no mencionó nombres, sus palabras apuntan a una falta de confianza y reconocimiento por parte de algunos miembros de su familia. Esto ocurre mientras la joven intenta construir su propio camino, alejada del perfil mediático que caracterizó a su padre, pero sin renunciar a su rol en la empresa familiar y a su identidad como influencer.
En paralelo, Marta también estuvo en el centro de la escena por sus declaraciones contra Virginia Gallardo, expareja de Ricardo Fort, a quien acusó de usar la imagen del empresario en su campaña política. “Me parece bastante de cuarta”, dijo sin filtros en una entrevista, reavivando viejas tensiones que rodean el legado del “Comandante”.
El mensaje de Marta generó una ola de reacciones en redes sociales: miles de usuarios le enviaron palabras de apoyo y empatía, destacando su valentía para hablar de temas que suelen quedar ocultos tras la fachada del lujo. Porque, como ella misma escribió, “no hay vida ostentosa ni viaje a Miami que lo tape”. Una frase que resume la contradicción entre la imagen pública de abundancia y la realidad emocional que atraviesa la heredera de uno de los apellidos más mediáticos de la Argentina.





