27.5 C
Buenos Aires
martes, octubre 21, 2025

Entre lágrimas, Nicolás Behringer cuenta la intimidad de su triunfo en La Voz Argentina y recuerda su dura historia: «La calle me enseñó a seguir siendo yo»

Más Noticias

Pasaron pocos días desde que Nicolás Behringer compartiera con GENTE su jornada de artista callejero y contara en aquella ocasión su inspiradora historia de vida, con una niñez atravesada por las carencias y la resiliencia. Un breve tiempo en el que pasó de todo. Es que hoy, tan sólo unas semanas después de aquella nota, el cantante está sentado aquí, en el estudio de Atlántida, con el trofeo de campeón de La Voz Argentina, algo que soñaba y que ahora es una realidad.

«La verdad es que no caí todavía», dice el integrante del team Luck Ra, y recuerda que siempre hubo algo que lo impulsó a continuar, más allá de sus miedos, dudas y del contexto en el que vivió. «Encontré a muchos guías en el camino, gente muy linda de la que me he inspirado mucho y que hoy son familia«, sostiene.

Es que así, acompañado, pasó de cantar en las estaciones de subte y trenes, o en las veredas de Buenos Aires, a mostrar su talento frente a todo el país en en el reality de canto de Telefe.

Cabe recordar que en su presentación a ciegas sólo Luck Ra se dio vuelta y le dio la oportunidad de avanzar en la competencia junto a él, hasta finalmente convertirse en el ganador de la quinta temporada gracias al apoyo de la gente, que le dio su voto.

Así es como su historia de vida y su poderosa interpretación de clásicos del rock nacional lo convirtieron en el favorito del público.

El soñado presente de Nicolás Behringer tras ganar La Voz Argentina

Hoy llega con otra sonrisa al estudio. No la de la ilusión de lo que podría llegar a ser, más bien esa que deja al descubierto la ingenuidad frente a semejante victoria en su carrera, la que apenas comienza. «Miren lo que les traje», dice entre risas y saca el trofeo que le recordará cada día que fue el campeón del reality de canto.

Nicolás Behringer, que trajo su trofeo de La Voz Argentina al estudio de GENTE, y expresa su emoción por este importante logro: «Aún no lo puedo creer».

Con el mismo espíritu rockero que mostró en cada presentación del certamen, posa frente a la cámara. Con la música de Soda Stereo de fondo, y disfrutando su primera producción de fotos como ganador de uno de los formatos más populares del mundo. «No estoy acostumbrado a esto«, se sincera, pero escucha atento las indicaciones del equipo y poco a poco entra en confianza.

«La verdad es que es un montón, es un montón todo. Es una oportunidad única«, confiesa. Y sigue: «Me pongo a dimensionar y es tremendo. Uno puede llegar a desearlo, pero de ahí a que suceda es muy díficil. Es pensar en cuántas posibilidades hay en llegar a ser campeón de La Voz Argentina, y pensar en todo lo que pasa en el medio».

Las emociones del día más esperado: la gran final

La producción grabó cuatro posibles finales con cada uno de los participantes, por lo que Nicolás se enteró al igual que el resto de la gente de que había ganado: frente al televisor, en la intimidad de su casa y rodeado de su gente.

Sobre ese momento, que si bien fueron sólo unos minutos se le hizo eterno, cuenta: «Estaba muy ansioso, porque lo viví con la misma emoción que en la grabación… Pero fue muy lindo para nosotros porque al ser grabado, nos permitió estar contenidos con la gente que amamos, porque es difícil estar parado en ese escenario y que te digan: ‘¡Sos el campeón de La Voz!’, o ‘saliste segundo, saliste tercero, saliste cuarto’. Si bien es una experiencia hermosa, también hay cosas que resultan muy abrumadoras. Yo preferí un millón de veces estar con mi familia, con la gente que amo».

Nicolás se enteró de que era el ganador del famoso reality como todo el público, mientras estaba acompañado por sus seres más queridos.

Contabas que ese día de la final miraste tu teléfono y de golpe tenías más de cien mil mensajes, algo que es nuevo también para vos.

-¡Sí! Fue tremendo. Lo decís y me da dolor de panza (risas). Después de esa noche he estado recibiendo miles y miles de mensajes, no exagero. Por eso hay muchos que no pude contestar. Voy respondiendo de a poco como puedo, pero no me ha dado el tiempo, y es una sensación muy fuerte. Porque quisiera dedicarle la atención que merece cada uno, por todo el apoyo que me han dado.

¿Cómo ha sido asimilar eso en tan pocas horas?

– A ver… No soy una persona distinta a cómo otra pueda percibir o sentir. Si poco a poco voy ganando experiencia en ciertos aspectos que me ayudan a poder estar más relajado y no dejar de ser yo. A estar sintonizado conmigo mismo. Trato de mantener mis momentos de calidad con mi gente. Por lo menos ayer terminé de cumplir con los compromisos y llegué a casa y le cociné a mi familia, y ellos estaban re contentos. Si bien estaba cansado, todavía tenía energía para estar con ellos. Creo que tiene que ver con que me siento sintonizado conmigo, y eso me permite que sea más fácil todo. Pero antes hubo un gran laburo interno, para que hoy eso sea así.

¿Pudiste mantener esa sintonía durante todo tu proceso en La Voz Argentina?

-Sí, sí, sí, estuve muy presente. De hecho, algo que la gente no sabe es que venía la canción siguiente y yo ni siquiera la había escuchado una sola vez. Hasta que no terminaba la grabación y terminaba lo que tenía que terminar, en cada una de las instancias, yo no ensayaba la otra. Por ahí me aplicaba y en media hora lo tenía, pero era una cosa de querer disfrutar de cada etapa y respetar sus tiempos. Pensaba: «Estoy acá y estoy ahora».

El joven de 28 años asegura que disfrutó todo su paso por la competencia, y más allá del resultado, menciona que fue una experiencia que le dejó muchas enseñanzas.

-Esa experiencia la vivís una sola vez en la vida. Tenías que disfrutarla, ¿no?

-Claro, y justamente ese es mi consejo para todas aquellas personas que quieran anotarse en un futuro: disfruten, gente. El proceso hay que vivirlo estando bien presente, porque realmente al caer en consciencia te das cuenta de que es algo que no vas a volver a vivir. Sí, te podés anotar en cualquier otro concurso, pero ese recorrido en La Voz Argentina me lo llevo para toda la vida.

Nicolás Behringer nunca recibir clases de música a ganar La Voz Argentina

Nicolás no llegó al escenario de La Voz con una carrera musical consolidada ni con estudios académicos en canto. Llegó sí con una mochila llena de canciones y, sobre todo, de vivencias. Durante años, cantó en las calles de Buenos Aires para subsistir junto a su hermana menor, a quien cuidó desde la muerte de su padre. Sin embargo, pese a esa particular formación, el joven avanzó firme en cada etapa del programa, ganándose el cariño del público hasta alzarse con el trofeo.

-Cuando nos contaste tu historia nos dijiste que nunca habías recibido clases de música. Fue todo por instinto, ¿cierto?

-Así es. Yo entré al concurso sin trabajar nada en mi voz. Todo lo que iba cantando o que iba avanzando en la música, era por estar practicando horas y horas, cantando y viéndome y viendo grabaciones. Era sentarme a autoevaluarme y pensar qué podía mejorar. Decía: «Esto podría hacerlo distinto». Me escuchaba y pensaba: «Esto me hace sentir incómodo», «Esto me hace sentir más liberado», y así iba probando distintos géneros para poder ofrecer un repertorio variado también. Entonces me tocaba exigirme en ese sentido.

-¿Por qué elegiste ese camino?

-Porque en ese momento no podía darme el lujo de tomar clases porque no llegaba con la plata, a nivel económico no podía. Pero en este último tiempo sí tuve una coach muy buena, y todo el equipo que me ayudó dentro del programa en mi preparación, incluyendo a Luck Ra.

Behringer se formó de manera autodidacta en el canto, pero ahora comenzó a trabajar con una coach.

¿Qué sentís que cambió en vos como artista con toda esta preparación que no tenías antes?

-La verdad que Daniela, mi coach, me acompañó mucho y en el último tiempo me hizo poder sacar algo mejor de mí. Es una maravilla de mujer, que tiene vocación para enseñar. Es el tipo de persona que te dice: «Yo no quiero cambiar algo de lo que sos. Yo quiero que el artista que sos brille, se potencie. Que lo que sos como artista, se fortalezca». Y me quedo con eso de toda esta preparación.

Detrás de cada canción, una historia de vida

-Te abriste a contar tu historia y se generó una genuina empatía de la gente, pero no dejaste de dar lo mejor en cada performance para demostrar por qué merecías ese lugar.

-Fue lo que viví, pero como yo, todos vivimos historias difíciles. Cada uno de los que me está escuchando tienen en el día o en su vida alguna cosa que seguramente les habrá dolido mucho y habrá sido un impacto en su vida. Soy muy consciente de eso. Pero si yo quisiera construir una carrera no me serviría construirla sólo con una historia, tengo que construirla con quien soy como artista y lo que tengo para dar con mi música. Entonces, si no tengo la cualidad artística para hacer algo de eso, no me serviría avanzar y ganarme la confianza de la gente tampoco. Así que estoy muy agradecido de haber podido avanzar en la competencia gracias a también a la conexión con la gente.

-Es parte de mostrarte tal cual a la gente.

– Claro. A mí me cuesta más hablar de todas esas cosas porque yo creo que tengo mucho para dar como artista. No salía a la calle y les decía: «Gente, mi viejo murió, me hago cargo de mi hermana, denme plata». No. Yo cantaba y me rompía el lomo cantando. Y canté muchos géneros. Cantaba ópera, tango, pop, zamba, rock, cumbia. Iba y te hacía un show. Me contrataban para un evento y me adaptaba a lo que pedía y quería escuchar la gente.

Behringer aprendió a hacer música por instinto, se animó a salir a cantar a las calles de Buenos Aires.

-¿Qué sentís que te enseñó la calle que pudiste aplicar en el escenario?

-Como artista callejero aprendí a improvisar, poder brindarme a la gente. Porque cada vez que salía a la calle, si no me abría con la gente musicalmente, no les daba lo que les tenía que dar, que era mostrarme como realmente soy como artista, entonces no tenía devolución económica. No ganaba nada. Durante un tiempo salía muchas horas y volvía a casa sin plata. Y eso era porque trataba de cantar algo que sorprendiera, pero no era lo que yo sentía, no era lo que yo quería en ese momento. Como no era eso y no lo sentía, no podía fluir, me iba mal. Así que la calle me enseñó a realmente seguir siendo yo, independientemente de lo que sea que venga.

Luck Ra: su contención en todo su recorrido por La Voz

-En La Voz encontraste a un coach, pero también gran compañero, Luck Ra. ¿Qué significó tenerlo a él de apoyo?

-Cuando fue el único en darse vuelta en mi audición, pensaba: «Wow, qué intimidante. Vos transitaste tanto de todo esto, sos más chico que yo y estoy aprendiendo tanto». Facu es un maestro tan grande, por todo lo que ha logrado, pero trato de no invadirlo, por decirlo de alguna manera. Porque estoy empezando a construir mi camino y soy muy respetuoso con los tiempos y los espacios de los demás. Y además de él, lo más lindo que me llevo de La Voz fue el grupo tan lindo que se formó con Tomás Dantas, Fede Mestre, Lucas Barros, Nat Ponte y Ema Roach.

Luck Ra fue el único coach en darse vuelta en su audición a ciegas. Y este triunfo es doblemente especial para ellos, ya que, además, era el debut del cantante cordobés en el jurado del programa.

-Y afuera del programa también tuviste gente querida acompañándote.

-No puedo estar más agradecido por las personas cercanas a mí que hicieron la recorrida a mi lado y me bancaron en todo momento. Julieta Behringer, mi hermanita. Sofía Masa, mi pareja y toda su familia. Germán Ocando, mi coach, mi compañero de la calle, mi maestro en la calle. Nicolás Villafañe, mi hermano de la vida, que me acompaña desde que tengo 13 años. No quiero llorar porque me emociona eso. Me emociona tenerlos a todos ahí (se le quiebra la voz). Denise Carrere, que también es mi hermana, mi mejor amiga.

-Quiero que escuches un audio que te mando una persona muy especial para vos, el de tu novia, que te cuenta lo orgullosa que está de vos… (NdR: comienza a escucharse el audio y Nicolás se quiebra).

-¡Me muero! No quiero llorar… ¿por qué me hiciste llorar? Sabés que no me gusta (risas y suspiro). Me mandó el audio Sofía Masa, mi pareja. Es un amor, es una persona que es muy dulce, muy divertida, muy compañera. Te adoro, mi vida. La verdad que fuiste una compañera divina en este tiempo, igual que todos los que estuvieron ahí. Todos estuvieron codo a codo conmigo y voy a estar siempre muy agradecido de eso con ustedes.

-¿Te cuesta mostrarte de esta manera? ¿Emocionado?

-(Suspiro) Cuando digo que no me gusta llorar, no me refiero a que esté mal llorar. Sino que hay cosas que me gusta procesarlas o sentirlas con la gente que quiero, con lugares donde me siento seguro, porque es dejarte ver en tu versión más vulnerable y mucha gente lo puede tomar de otra manera.

El cantante agradece por todo el apoyo y contención que recibió durante todo su paso por la competencia, ya que si bien menciona que es una experiencia hermosa, también resulta abrumador todo lo que le cambió la vida de un momento a otro.

«Mi papá donde sea que esté, está celebrando»

-La vez anterior que hablamos, me decías que cada vez que subías al escenario era una manera de rendirle homenaje a tu papá. ¿Sentís que en la final también pudiste hacerlo?

-Hablar de mi viejo y contar sobre cómo hubiese sido para él verme sobre un escenario, es tremendo. Y al mismo tiempo que lo digo caído en cuenta de lo que significa todo lo que estoy viviendo. Es poner los pies sobre la tierra. Y me mueve mucho porque es muy fuerte y emocionante. Hubiese querido un final distinto para él, hubiese querido muchas cosas muy distintas para él, no sólo un final. Hay mucho que le quería dar como hijo y que no tuve la oportunidad de dárselo. Entonces, poder pensar en eso, caer en cuenta eso me rompió por completo. Y al final, siento que de alguna manera él y mis abuelos, que también los amo con mi vida, que eran los padres de él, donde sea que estén están celebrando. Sé que hubiesen sido los primeros en venir a darme un abrazo y estar en las tribunas.

-¿Qué se viene ahora para la vida de Nico? ¿Con qué soñás?

-Siempre pienso en muchas cosas, pero estoy preparado para lo que venga. Voy a tratar de seguir conectado a mi presente. Quiero hacer mucha música, quiero hacer de todo. Me quiero divertir, quiero seguir disfrutando. Quiero seguir construyendo todo esto que vengo haciendo y que hacía desde que andaba en el subte.

Además del premio que se lleva de La Voz Argentina, que le permitirá poder asegurar su bienestar y el de su hermana, Nicolás desea poder vivir de la música y llegar a mucha más gente con su arte.

-¿Qué le dirías a ese Nico que empezó practicando en su casa con la guitarra ahora que sos el campeón de La Voz?

-(Piensa unos segundos). Creo que más que decirle algo, dejaría que se equivoque. Porque hay que equivocarse. Tenés que hacer cosas. Y hacer cosas no implica hacerlas siempre bien, significa hacer. No hay que estar con preocupación, hay que estar con acción. Tendría que equivocarme mucho y me equivoqué mucho, y estoy muy feliz de eso porque eso me enseñó muchas cosas para hacer mejor muchas cosas. Nunca fueron errores fatales, pero me sirvieron. Me permitió mirar para adentro y decir, «¿quién quiero ser?, ¿quién soy?». Así que estoy orgulloso de que ese Nico del pasado se equivoque en lo que sea que se tenga que equivocar, y respeto su proceso, porque es lo que necesitaba en ese tiempo. La persona que soy hoy necesita otra cosa.

Fotos: Chris Beliera
Video: Martina Cretella y Candela Petech.
Dirección de arte y retoque: Silvana Solano.

Redacción

Fuente: Leer artículo original

Desde Vive multimedio digital de comunicación y webs de ciudades claves de Argentina y el mundo; difundimos y potenciamos autores y otros medios indistintos de comunicación. Asimismo generamos nuestras propias creaciones e investigaciones periodísticas para el servicio de los lectores.

Sugerimos leer la fuente y ampliar con el link de arriba para acceder al origen de la nota.

 

- Advertisement -spot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img

Te Puede Interesar...

El dólar oficial supera los $1.500

La jornada del martes 21 de octubre de 2025 mostró una nueva alza para el dólar oficial en Argentina:...
- Advertisement -spot_img

Más artículos como éste...

- Advertisement -spot_img