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En un gesto inédito hasta la fecha por parte del Gobierno español, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, reconoció este viernes públicamente el «dolor» y la «injusticia» sufridos por los pueblos originarios durante el periodo colonial. Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, celebró estas palabras como un «primer paso».
«Como toda historia humana, tiene claroscuros. Ha habido dolor e injusticia hacia los pueblos originarios. Hubo injusticia, justo es reconocerlo y lamentarlo», afirmó el jefe de la diplomacia española, durante la inauguración de la exposición ‘La mitad del mundo. La mujer en el México indígena’. «Esa es parte de nuestra historia compartida, no podemos negarla ni olvidarla».
El gesto, aunque no equivale a una disculpa formal, representa el acercamiento más significativo entre ambos países desde que, en 2019, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador solicitara una disculpa oficial por los abusos cometidos durante la conquista. En aquel momento, el Gobierno español rechazó la petición con rotundidad, provocando un enfriamiento diplomático que se ha prolongado hasta hoy.
La exposición, organizada conjuntamente por ambos gobiernos, reúne más de 400 piezas procedentes de comunidades indígenas mexicanas y se presenta en cuatro sedes: el Museo Arqueológico Nacional, el Instituto Cervantes, el Museo Thyssen-Bornemisza y la Fundación Casa de México. Albares la definió como «un símbolo de justicia y reconciliación» y «un hito en la hermandad entre ambos países».
A falta de una disculpa oficial
Desde Ciudad de México, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó las declaraciones como «muy importantes» y destacó que es «la primera vez que una autoridad del Gobierno español lamenta la injusticia». Aun así, insistió en la necesidad de avanzar hacia una disculpa formal.
«Enhorabuena por este primer paso del canciller del Gobierno español«, expresó la mandataria. «Es la primera vez que una autoridad del Gobierno español habla de lamentar la injusticia. Es importante. Desde mi punto de vista, es un primer paso y habla de la importancia de lo que siempre hemos dicho».
Las relaciones entre ambos países se tensaron especialmente tras la toma de posesión de Sheinbaum, en 2024, cuando el rey Felipe VI no fue invitado al acto, un gesto que la mandataria justificó como respuesta a la falta de reconocimiento histórico. El mensaje de Albares podría marcar el inicio de una nueva etapa de diálogo entre Madrid y Ciudad de México.
