• Una infusión suave y prolongada puede convertirse en la mejor aliada cuando el cuerpo se rinde
Foto: Unsplash.
Redacción El País
Muchas personas, aun sintiéndose físicamente agotadas, se hallan dando vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño. En estos casos, el problema no está en el cuerpo, sino en el sistema nervioso. Para esos casos, hay una infusión que puede ayudar.
Según la revista Bon Appétit, una mezcla de hierbas como lavanda, flor de avena, tulsi, tilo y manzanilla puede ayudar a inducir el descanso incluso en momentos de fatiga extrema. Esta combinación actúa en distintos niveles: físico, mental y emocional.
¿Por qué esta combinación funciona como infusión?
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Cada planta aporta un efecto específico, y juntas se potencian entre sí. La lavanda, famosa por su aroma relajante, ayuda a calmar la ansiedad y a reducir el exceso de pensamientos. La flor de avena tiene una acción directa sobre el sistema nervioso, ideal para quienes acumulan estrés pero no toleran medicamentos para dormir.
El tulsi (también conocido como albahaca sagrada) actúa como adaptógeno, es decir, ayuda al cuerpo a regular su respuesta frente al estrés prolongado. El tilo, por su parte, alivia la tensión muscular y mejora la circulación, mientras que la manzanilla contribuye a relajar el sistema digestivo, que muchas veces interfiere en el sueño reparador.
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Para aprovechar realmente sus beneficios, se recomienda dejar reposar la infusión entre 10 y 15 minutos. Ese tiempo permite que se liberen por completo las sustancias activas de cada planta.
Lo ideal es beberla unos 30 minutos antes de irse a dormir, sin pantallas ni estímulos externos, como parte de un ritual relajante. Su sabor es suave, floral y sin amargor, lo que la hace agradable incluso para quienes no suelen tomar té.
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