Un adolescente de 15 años murió durante un tiroteo con un gendarme que se encontraba de franco de servicio en la localidad de 9 de Abril, partido de Esteban Echeverría, luego de un intento de robo ocurrido la noche del lunes último, informaron fuentes policiales.
El episodio se produjo alrededor de las 20.30 cuando personal del Comando de Patrullas de Esteban Echeverría acudieron a un llamado al 911 que alertaba sobre detonaciones de arma de fuego en la calle Río Grande al 160, en el barrio Nuestras Malvinas.
Al llegar, los uniformados hallaron un motovehículo Motomel Boxer sin patente y, a pocos metros, el cuerpo de un joven con manchas hemáticas en el rostro tendido sobre la vía pública. Minutos más tarde, personal del SAME confirmó el fallecimiento del adolescente.
En el lugar se presentó un cabo de Gendarmería Nacional, un joven de 24 años, quien se encontraba franco de servicio y relató que, mientras realizaba viajes para la aplicación DiDi, fue interceptado por dos motocicletas con cuatro ocupantes armados que intentaron sustraerle sus pertenencias y su moto Yamaha FZ 150.
Según su testimonio, al ser golpeado por los delincuentes, extrajo su arma reglamentaria Bersa TPR 9 mm y dio la voz de alto, efectuando varios disparos contra los agresores que huyeron del lugar. Uno de ellos cayó abatido, mientras que los demás escaparon.
En el sitio del hecho, los peritos secuestraron vainas servidas calibre 9 mm, una réplica de pistola Bersa, y la Motomel que habrían utilizado los asaltantes.
Dos balazos
Posteriormente, se logró identificar al fallecido como Tiziano Hugo Jesús Montoya, de 15 años, domiciliado en la zona. Durante la revisión del cuerpo, el médico forense constató dos heridas de bala, una en el hombro izquierdo y otra en la zona costal derecha, y halló en su pantalón un revólver negro sin numeración visible.
Interviene en la causa la Unidad Funcional de Instrucción N° 8 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, a cargo de Alejo Vésques, quien caratuló las actuaciones como “Homicidio en exceso de la legítima defensa”. Se dispuso el secuestro del arma reglamentaria del gendarme, la realización de pericias científicas y dermótest tanto al efectivo como al fallecido.
