
Guadalajara (México), 28 may (EFE).- Los gobiernos de América Latina deben concebir el acceso a los cuidados de personas vulnerables como un derecho a garantizar, además de asegurar el bienestar de quienes cuidan, afirmó este miércoles en México la socióloga especialista Paola Mascheroni.
“Los cuidados no son responsabilidades individuales, responsabilidades de los hogares, de las personas y de las mujeres que son las que asumen los cuidados, sino que también son responsabilidades de los gobiernos que deben de garantizar el derecho al cuidado de calidad de las personas y el derecho a no cuidar y el derecho al autocuidado”, señaló.
Mascheroni ofreció la conferencia ‘Hacia una cultura de cuidados y corresponsabilidad: oportunidades en el ámbito local’, como parte de la VII Cumbre Iberoamericana de Agendas Locales de Género y el XV Congreso Iberoamericano de Municipalistas que se desarrolla en en Guadalajara (oeste de México) hasta el próximo 30 de mayo.
De acuerdo con un estudio de ONU Mujeres, México es uno de los países de la región en el que los hombres realizan menos trabajo doméstico y no remunerado, puesto que las mujeres son quienes tienen más carga en este tipo de actividad. Países como Guatemala, Honduras o Ecuador comparten esta realidad.
La especialista en políticas de cuidado de la Universidad de la República en Uruguay señaló que en México, el trabajo doméstico y de cuidados constituye el 26% del Producto Interno Bruto, una actividad mayormente realizada por mujeres sin ningún tipo de remuneración.
Afirmó que esta actividad ha sido reconocida como un trabajo de cuidados es necesario considerarla también como un derecho pues todas las personas en el mundo necesitarán ser cuidadas al menos una vez en la vida, ya sea en niñez y adolescencia, la vejez o en alguna situación de enfermedad o discapacidad.
Mascheroni advirtió de la necesidad de considerar los territorios y las zonas rurales como un factor que incide en las desigualdades sociales relacionadas con infraestructura para el acceso a la salud, a la movilidad, a los recursos económicos y de alimentación necesarios para garantizar los cuidados adecuados.
Señaló que hay una visión del bienestar centrada en las ciudades, pero se deben considerar a todos los territorios de un país pues son las mujeres indígenas y afrodescendientes en quienes recae el trabajo no remunerado y los cuidados de su comunidad desde la niñez.
Añadió que esta visión de los territorios permite considerar a quienes defienden los recursos naturales y el medio ambiente como parte del sistema de cuidados necesarios para la vida.
La VII Cumbre Iberoamericana de Agendas Locales de Género y el XV Congreso Iberoamericano de Municipalistas continuará hasta el 30 de mayo con conferencias, mesas de diálogo y talleres acerca de cómo integrar mejores políticas públicas que beneficien a las mujeres desde lo local.