Florencia Peña habló sin filtros sobre la polémica que envuelve a Guillermo Francella y su nueva película Homo Argentum, que en las últimas semanas generó un fuerte debate público. En un móvil con Intrusos (América TV), la actriz se refirió tanto a las declaraciones del actor como al rol del Estado en el financiamiento de la cultura y dejó frases contundentes.
“Yo creo que hay una ensalada rusa, se han mezclado todos los temas. Yo a Guille lo adoro, le tengo un gran cariño porque trabajé mucho con él y fue un gran maestro para mí en la comedia. Pero sé dividir las aguas: yo lo quiero, lo respeto y sé que ese respeto es mutuo. Ahora bien, no pienso para nada como él”, comenzó diciendo, marcando la diferencia entre la amistad y admiración personal y la discrepancia ideológica.

Consultada sobre si estaba de acuerdo con la postura de Francella, quien había cuestionado sobre tipos de películas y su llegada, así como la financiación estatal para ciertas producciones cinematográficas, Peña fue clara: “Para mí el arte nunca puede estar supeditado a un resultado. La cultura de un pueblo es esencial y debe haber un Estado presente, como en los países más desarrollados del mundo, que garantice espacios para que chicos sin recursos puedan ingresar al arte. El arte es sanador”.
La actriz enfatizó que el éxito de una película no siempre puede medirse por la cantidad de público: “Yo he hecho cosas muy buenas que no vio nadie y otras no tan buenas que se llenaron. El arte es subjetivo, nadie puede decir qué es bueno o qué es malo. Celebró que a Homo Argentum le esté yendo bien, que la gente vaya y saque sus conclusiones. Pero cuando el presidente opina, todo se vuelve muy político”.

Peña también se refirió a la información que circuló en las últimas horas sobre un eventual apoyo económico estatal a la película. “Si la película recibió un estímulo estatal, más a nuestro favor. No me parece mal, al contrario, así debería ser. Yo no voy a poner nunca en un paredón de fusilamiento a Guillermo ni a ningún colega por decir algo con lo que no estoy de acuerdo”, sostuvo.
Y cerró con una reflexión que sintetiza su mirada: “Bienvenido el debate cuando estas cosas pasan, pero el cariño que le tengo a Guille no tiene nada que ver con mi manera de pensar”.
Con estas declaraciones, Florencia Peña buscó aportar calma a una polémica que cruzó lo artístico con lo político, dejando claro que, aunque no comparte la visión de Francella sobre el éxito de ciertas producciones y el rol del Estado en el cine, lo sigue considerando un referente y un compañero al que respeta profundamente.