Este fin de semana, Fundación Cultural Patagonia (FCP) presenta en calidad de estreno un ballet en un prólogo y tres actos: “Don Quijote”. Con más de cuarenta bailarines en escena, esta superproducción, interpretada por el Ballet Clásico y Contemporáneo FCP, y dirigido por Verónica Arévalo Schiavo, también responsable de la reposición coreográfica ofrecerá funciones este viernes, mañana sábado y el domingo, en todos los casos a las 21, en el Auditorio Dr. Tilo Rajneri (Rivadavia 2263, Roca).
“Don Quijote” es una versión de la famosa novela escrita por Miguel de Cervantes, en particular de las “Bodas de Camacho”, episodio narrado en el capítulo XIX de la segunda parte, en el que se relata el romance entre el barbero Basilio y la joven Kitri. El libreto es adaptado por Marius Petipa, en el que la protagonista es Kitri, una mujer alegre y valiente, capaz de decir no. Una heroína para la época, ya que la obra fue estrenada en 1869.

Se trata de una representación colorista que rompió con los otros ballets de la época como “El lago de los cisnes”, en el que aparecían figuras etéreas y sobrenaturales, para centrarse en la gente del pueblo. Otro aspecto distintivo es la fuerte inspiración, por parte de los compositores, en el ballet español y bailes de carácter adaptados a la técnica del ballet clásico. FCP propone la reposición coreográfica de Verónica Arévalo Schiavo basada en Petipa, Gorski y Barishnikov. La música es de Ludwig Minkus.
«Don Quijote» por FCP: un gran desafío artístico
“Don Quijote” es la segunda obra que presenta el joven ballet roquense, luego de “El lago de los cisnes”, estrenada el año pasado. En un diálogo con Diario RÍO NEGRO, Verónica Arévalo Schiavo cuenta que eligió esta obra basada en el clásico de Cervantes porque justamente difiere totalmente de la puesta anterior.
“El Lago de los Cisnes es un ballet muy blanco, muy romántico, donde los cisnes son seres totalmente etéreos, sumisos, muy reflejo del romanticismo de la época. Don Quijote es totalmente distinto. Acerca más la propuesta a la gente del pueblo. Es bien terrenal”, revela la directora del Ballet FCP.

“Si bien tiene un cuadro blanco, que es cuando Don Quijote es atrapado por el gigante, que es un molino de viento, y cae en un sueño profundo y comienza a soñar su Dulcinea del Toboso, está habitado por seres fantasmagóricos también que se remontan al renacimiento. Son dríades, seres muy de ensueño, muy ideales, del ideal de belleza de la mujer en esa época, como se reflejaba en el lenguaje del ballet”, aclara.
“Algo que tiene el ballet en general es que la expresión justamente no es la palabra y no es fácil expresar con movimientos un diálogo. Este es un ballet que tiene muchísima actuación”.
Verónica Arévalo Schiavo, directora del ballet.
La pieza relata la historia de cuando Don Quijote llega a la plaza de Barcelona en sus andanzas, en sus ansias de hacer justicia por el mundo. “Pero Don Quijote pasa a ser un personaje secundario dentro del ballet”, apunta Arévalo Schiavo. “Ahí es donde está la adaptación y cobran protagonismo Kitri, que en la novela es llamada Kiteria, y Basilio, que es su pretendiente”.

Kitri es una mujer capaz de decir no para la época o, como la definirá Arévalo Schiavo, una feminista anticipada. “Kitri está comprometida con Camacho. En la novela se hace alusión a las bodas de Camacho, al capítulo 20, 21 y 22, donde relatan las historias de este rico noble. Lorenzo, el padre de Kitri, está contentísimo porque va a anunciar la boda. Lo cierto es que Kitri es obligada por su padre a comprometerse en matrimonio con Camacho, el hombre rico del pueblo, pero Kitri ama al barbero Basilio. Y sin embargo, para esa época, estamos hablando de una obra que fue creada en 1869, Kitri pasa a ser una heroína capaz de decir no a su propio padre”.
«Don Quijote» por FCP: una puesta gigante
¿Cómo es la puesta? “La puesta es un gigante como el molino de viento”, dice entre risas la directora. “Es una movida bastante importante porque requiere, no solamente de muchos bailarines, de técnicos, sino que hay mucha demanda de movimientos todo el tiempo, de cambios de telones, de cambios de ambiente con respecto a la iluminación. Hay muchos cambios emocionales. Pasamos de un estado de ánimo al otro y eso se trabaja con los bailarines, mantiene al espectador todo el tiempo alerta y pendiente de lo que va a seguir sucediendo”.

Para el Ballet FCP esta puesta es un desafío porque es una puesta que hacen los grandes teatros que tienen elencos muy numerosos, destaca Arévalo Schiavo. “Es una obra que, de acuerdo a la adaptación de cada teatro, puede durar hasta dos horas y media. En este caso, hice un recorte con las piezas que me parecen fundamentales, que no pueden faltar. Y también para nuestro público, que tampoco está acostumbrado a ver una obra de ballet tan larga, que conlleva tanto tiempo de atención. Voy directamente al grano, al kit de la cuestión. Que no se pierda la esencia de lo argumental, de la historia y tenga un buen desenlace”.
«Don Quijote pasa a ser un personaje secundario dentro del ballet, porque en la adaptación cobran protagonismo Kitri, que en la novela es llamada Kiteria, y Basilio, que es su pretendiente”.
Verónica Arévalo Schiavo, directora del ballet
Si bien es un ballet complejo y de mucho carácter, a la vez es muy divertido bailarlo porque rosa la comedia”, destaca la coreógrafa. “Si lo pudiéramos comparar con el teatro, sería un ballet comedia. Y no es fácil, a veces es muy difícil hacer divertir al público. Quizás los bailarines nos divertimos porque entendemos más la obra, pero hacer llegar con la mímica específica del ballet, los elementos de la actuación y sumado a la rigurosidad de la técnica, no es fácil hacerlo todo junto y que funcione”.
En este sentido, “Don Quijote” es un ballet muy técnico destaca Arévalo Schiavo. “Los primeros bailarines deben tener una técnica muy precisa, muy consolidada. En nuestro caso, si bien son jovencitos, van por ese camino. Es más, hace poquito, nuestro primer bailarín, Máximo Nieto, audicionó para el ballet del Teatro Argentino de La Plata y ha quedado seleccionado. Así que posiblemente en estas funciones sea una de sus últimas funciones aquí. Los chicos vienen trabajando muy bien con la técnica. La exigencia es diaria. Todos los días tenemos nuestra clase de técnica, de perfeccionamiento de la técnica. Y así lo exige esta obra. No solamente en técnicas, sino en cuestiones también artísticas”.
“Algo que tiene el ballet en general es que la expresión justamente no es la palabra y no es fácil expresar con movimientos un diálogo. Este es un ballet que tiene muchísima actuación”, resume Arévalo Schiavo.
«Don Quijote»: ficha técnica y funciones
El Ballet Clásico y Contemporáneo FCP presenta 46 artistas en escena y cuenta con la dirección de Verónica Arévalo Schiavo. La asistente ensayista es Victoria Dorrego y el pianista acompañante es Felipe González.
“Don Quijote” cuenta con el diseño y realización de vestuario de Claudio Clozza y Carla Lorente; el diseño de luces de Walter Marcello y la producción de FCP para la escenografía y utilería.
La entrada general posee un valor de $20000. En venta en Secretaría de FCP (Rivadavia 2263, Roca).
Funciones: este viernes, mañana sábado y el domingo. Viernes 19, sábado 20 y domingo 21.
Bailarín invitado
Miguel Ángel Klug
Primer bailarín
Máximo Nieto
Primeras bailarinas
Catalina Minardi
Luna Montoya
Solistas
Eugenia Messina
Brisa Rojas
Sabrina Carreño
Victoria Dorrego
Joaquín García
Doyel Crededio
Sergio Nova