General Rodríguez dio un paso clave en materia ambiental con la aprobación unánime de la creación de la Reserva Natural y Parque Municipal. La iniciativa, impulsada por el Ejecutivo local y acompañada por todos los bloques, consolida un acuerdo político poco frecuente.
El proyecto ya cuenta con un 80% de obra avanzada y se integra a un plan urbano que busca recuperar áreas degradadas y devolverlas a la comunidad. La reserva contempla un sistema de senderos elevados, infraestructura con energías renovables y un modelo de gestión que prioriza la flora y fauna nativa.
El municipio destacó que este espacio se convertirá en un punto estratégico para educación ambiental, turismo sustentable y recreación segura. La recuperación del predio, antiguamente usurpado, marcó un antecedente en la defensa de los bienes naturales del distrito.

Una obra pensada para regenerar ecosistemas
El proyecto prevé más de 470 m² de edificios cubiertos, 365 m² de áreas semicubiertas y 14,9 kilómetros de caminos y senderos. La reforestación con especies nativas alcanzará unas 15 hectáreas, lo que permitirá recomponer hábitats degradados y favorecer la llegada de fauna local.
La presencia de sectores históricos, como las ruinas de la Mansión Saavedra, se integrará a un circuito interpretativo sobre patrimonio cultural y natural. La reserva ofrecerá actividades de bajo impacto, como trekking, cicloturismo y avistaje de aves.
La planificación incluye zonas de humedales y un espejo de agua que servirán como refugio para especies clave del ecosistema. El parque busca posicionar a General Rodríguez como un nuevo destino de naturaleza en la provincia.
Una política ambiental que atravesó gestiones
Los bloques destacaron que la creación de la reserva es resultado de una política de Estado sostenida durante varias administraciones. La recuperación del predio, el diseño del plan de manejo y la inversión financiada parcialmente con créditos internacionales fueron parte de ese proceso.
El Concejo remarcó que la continuidad institucional permitió que el proyecto avanzara más allá de los cambios de gobierno. Algunos ediles señalaron que aún quedan desafíos pendientes, como la recuperación de hectáreas vecinas tomadas ilegalmente.
También pidieron avanzar en mejoras de accesibilidad y en la reapertura de calles cerradas que conectan el área natural. El cuerpo coincidió en que la reserva debe convertirse en un espacio protegido con participación comunitaria y control permanente.

El rol ecológico de las reservas naturales
Las reservas naturales cumplen una función esencial en la conservación de la biodiversidad. Actúan como refugios para especies nativas que enfrentan pérdida de hábitat, contaminación y presión urbana.
Su presencia permite sostener procesos ecológicos fundamentales, como polinización, regulación hídrica y control biológico de plagas. Además, estos espacios funcionan como corredores ecológicos que conectan fragmentos de bosque o pastizal separados por infraestructura humana.
Esa conectividad evita el aislamiento genético de las poblaciones animales y favorece su supervivencia a largo plazo. Las áreas protegidas también mejoran la resiliencia climática, ya que mitigan inundaciones y regulan las temperaturas locales.
En el plano social, las reservas promueven la educación ambiental y fortalecen el vínculo entre las comunidades y su entorno. Generan oportunidades de turismo sustentable, actividades recreativas y proyectos científicos orientados al estudio de la naturaleza. Su creación representa una inversión a largo plazo en salud, bienestar y sostenibilidad urbana.






