por Distrito Interior ·

Esta es una de las tantas escenas que prácticamente a diario se observa y de la que son parte muchos villeguenses, no solo quienes habitan en la ciudad cabecera, sino de los pueblos también.

La «nueva» terminal, vieja obra inconclusa, permitiría que las actuales líneas de colectivo que solo paran en la ruta, ingresaran, incluso se sumarían otras.
Las fotografías, tomadas una de las tantas tardes en la que los pasajeros, estudiantes en muchos casos, permiten observar cómo se genera un movimiento atípico en las rutas, en su intersección con los accesos (éste es el de la 33). Los viajeros, estacionados en las banquinas cruzan en algunos casos la ruta de un lado al otro representando un riesgo.
Esta situación, incluso reconocida por el intendente, es una de las tantas razones por las que resulta indispensable retomar y finalizar la obra de la nueva terminal, ubicada a unos 150 metros de las rutas 188 y 33.
Una ciudad que se proyecta en crecimiento no debe carecer de una terminal funcional, del mismo modo que un Gobierno provincial, al que le pertenece la obra no debe desentenderse (esta «deuda» con la sociedad, también califica para el Gobierno nacional).





