La noche mágica: Un puente musical entre culturas
Ante un público dividido en partes iguales entre argentinos y brasileños, Francisco Gil —nieto de Gilberto Gil y vocalista de la banda— irrumpió en el escenario con un gesto simbólico: la camiseta de la selección argentina, sellando una hermandad sonora que definiría la velada . Desde los primeros acordes de “Devagarinho” hasta el cierre con la pista en éxtasis, el trío transformó el recinto en un carnaval íntimo donde convivieron la tradición nordestina y el pop contemporáneo.
- Sonido envolvente: Guitarras cálidas, tambores afrobrasileños y arreglos electrónicos crearon una atmósfera que alternaba entre la nostalgia y la fiesta .
- Repertorio emblemático: Incluyó éxitos como “Várias Queixas” (con más de 285 millones de reproducciones en plataformas) y piezas de su álbum debut, tejiendo un diálogo entre la MPB clásica y el experimentalismo .
- Conexión afectiva: Las letras sobre amor, raíces bahianas y espiritualidad resonaron en un público que coreó en portugués, evidenciando la penetración transgeneracional de su música .
El legado familiar: Sangre, ritmo y revolución
Gilsons no es un proyecto cualquiera: es la continuación de un ADN musical revolucionario. José (hijo de Gilberto), João y Francisco (nietos) se formaron en los veranos de Bahía, donde el carnaval, el candomblé y las jam sessions con su abuelo moldearon su identidad . Su propuesta, descrita como “afropop con raíces en el baião y el afoxé”, actúa como puente generacional:
“Recuperamos los ritmos que Gilberto llevó al mundo en los 60, pero los filtramos con beats electrónicos y preocupaciones de nuestra época” .
El impacto: ¿Por qué Buenos Aires abrazó a los Gilsons?
La presentación —parte de su gira sudamericana— confirmó algo esencial: la música brasileña ya no es exótica en Argentina, es familiar. El éxito de ventas anticipado y la reacción del público demostraron que:
- La escena independiente porteña busca sonoridades orgánicas frente al mainstream digital.
- El linaje artístico se vive como garantía de autenticidad en tiempos de playlists efímeras.
- La fusión cultural (samba con indie, tango con bossa) encuentra aquí terreno fértil .
Detalles técnicos y simbólicos
| Aspecto | Descripción |
|---|---|
| Escenografía | Minimalista con proyecciones de paisajes bahianos y símbolos de candomblé . |
| Duración | 2 horas con un encore que incluyó un tributo acústico a Gilberto Gil. |
| Público | 50% argentinos (jóvenes y adultos amantes de la MPB), 50% brasileños residentes . |
Conclusión: Más que un concierto, un ritual compartido
La presentación de Gilsons en el C Art Media trascendió lo musical: fue un acto de resistencia cultural. Al mezclar el legado de Gilberto Gil con beats modernos, los jóvenes Gil reivindicaron que la herencia no es una carga, sino un trampolín. Su gesto de cerrar el show con la bandera argentina y la brasileña entrelazadas sintetizó su misión: derribar fronteras sin perder las raíces.
¿El resultado? Un público que, al salir a la fría noche de Chacarita, llevaba dentro el calor de Bahía. 🌟
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