Minuto 8 de partido. Giuliano Simeone remata de cabeza un centro de Javi Galán para el 1-0. Minuto 16. Julián Álvarez recibe un balón servido por Lino por la izquierda del ataque del Atlético de Madrid, cambia a la derecha a De Paul y éste sirve a Giuliano, que entra como un puñal en el área y remata con la derecha para vencer el arquero checo Jiri Letacek. En poco más de un cuarto de hora, el segundo hijo del ‘Cholo’ levantó al estadio. En 17 minutos firmó su primer doblete como futbolista rojiblanco. El hijo del entrenador ya es el nuevo ídolo de la afición. Los 52.896 espectadores que desafiaron al frío se rindieron a él después del triunfo 5-0 sobre Getafe, que metió al ‘Colchonero’ en semifinales de la Copa del Rey.
Giuliano se ha convertido, partido a partido, en un fijo en el once de su padre, que se muestra reacio a hablar demasiado de él y es parco en los elogios. Convencido de que es uno más, de que se tiene que ganar los aplausos con trabajo y esfuerzo. ‘De tal palo, tal astilla’, dice el refrán.
En cinco meses se los metió en el bolsillo y con toda justicia. Desde que llegó a Madrid tras su préstamo en el Alavés, Giuliano se ha ganado el corazón de su hinchada, que agradeció primero su entrega admirable y más tarde sus cualidades técnicas.
Porque Giuliano no es sólo sacrificio incansable. El hijo de Simeone lucha cada pelota como si fuese la última y conecta con Julián Alvarez a las mil maravillas. Giuliano nunca se rinde. Asiste y convierte goles. Ante el Getafe vivió su mejor noche como rojiblanco y su confirmación en un gran presente y un muy prometedor futuro. Sólo tiene 22 años. En el minuto 60, el Cholo lo sacó del campo de juego para meter a Gallagher en medio de una atronadora ovación. «Ole, ole, ole, Giuliano Simeone», gritó la grada.
«Es una locura. Desde muy chiquito, desde que llegué acá al Atlético de Madrid, en la cantera todos sueñan con un momento así», confesó en declaraciones post partido el mediocampista versátil, que ya tuvo su debut en la Selección Argentina Mayor y estuvo en los Juegos Olímpicos de París 2024.
«Estoy muy contento de estar acá, de pasar esta noche acá en el estadio. La verdad que fue una locura. Primero agradecer a todo el equipo. Hicimos un esfuerzo enorme por más que el resultado haya sido tan grande. No fue fácil. Estuvimos trabajando mucho, estamos contentos y ahora a disfrutar», completó.
El Atlético despachó al Getafe gracias a él en un abrir y cerrar de ojos. En ningún momento el conjunto de Bordalás dio sensación de peligro. No peleó. Nunca creyó en superar la eliminatoria porque su guerra es la Liga y la lucha por conseguir la permanencia en la máxima categoría.
Samuel Lino liquidó definitivamente el partido en el minuto 42. Precioso su recorte dentro del área a Juan Iglesias y disparo posterior. 3-0 y resultado sentenciado, aunque no terminado.
Si bien la segunda parte fue un trámite, Giuliano volvió a anotar, pero el tanto fue anulado por fuera de juego de Galán en el pase. A falta de un cuarto de hora Simeone movió el banco, porque el sábado se juega el clásico de la Liga ante Real Madrid en el Santiago Bernabéu con el liderazgo en disputa.
Angel Correa, otro argentino, aumentó la victoria con el cuarto en el minuto 78 con un tiro raso y ajustado desde muy cerca del vértice derecho del ataque madrileño. Alexander Sorloth redondeó la ‘manita’ en el 86.
El Atlético lo quiere todo. Los cuartos de Copa ya son historia. Partido a partido esperan las semifinales. Giuliano enfiló la goleada al Getafe, que suma ya 27 encuentros sin ganar a los rojiblancos. Sigue las trazas de su padre. El Metropolitano lo idolatra. De tal palo tal astilla.