El Ministerio de Exteriores de Guatemala ha expresado este martes su protesta a sus homólogos mexicanos por la incursión en territorio guatemalteco de un grupo especializado de la Policía del estado de Chiapas que persiguió y abatió a cuatro hombres armados, una actuación por la que las autoridades mexicanas se han disculpado.
«Esta incursión al territorio guatemalteco, en zona urbana y comercial, fue llevada a cabo fuera de los mecanismos de coordinación de seguridad entre los dos países, puso en peligro la vida de civiles, y no contribuye a las relaciones de buena vecindad entre Estados», ha denunciado en un comunicado la diplomacia de Guatemala, en referencia a la persecución y el tiroteo en la localidad guatemalteca de La Mesilla entre la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal (FRIP) y presuntos responsables de crimen organizado, según ha recogido el portal de noticias mexicano Animal Político.
El Ministerio de Exteriores de Guatemala ha pedido a las autoridades del país vecino que investiguen el «grave incidente para mantener la seguridad y el respeto recíproco en las zonas fronterizas» de acuerdo al Derecho Internacional. Además, ha instado a México a «profundizar con urgencia la cooperación y acciones en materia de seguridad fronteriza».
En respuesta, la Secretaría de Exteriores de México se ha disculpado con el Gobierno guatemalteco por estos hechos, reiterando «su compromiso con la defensa de la soberanía territorial y el Derecho Internacional para fortalecer los mecanismos de cooperación e incrementar la seguridad fronteriza» en una nota diplomática difundida en su cuenta en X.
Durante la operación, la Gobernación del Departamento de Huehuetango informó del desplazamiento a la zona de la Policía y el Ejército, aunque no intervino pese a que un militar resultase herido leve por el impacto de una bala en su pierna.
La actuación de las autoridades guatemaltecas fue percibida por el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez, como complicidad con los presuntos delincuentes perseguidos, lamentando que «no es cosa menor estar coludidos, pero lo que es peor es estar al servicio de la delincuencia». Por su parte, el secretario de Seguridad de Chiapas, Óscar Aparicio Avendaño, identificó en declaraciones al diario ‘La Jornada’ a los abatidos como miembros del Cártel de Chiapas y Guatemala.
