Vélez, el campeón del último torneo del fútbol argentino y que tuvo un pésimo arranque de 2025, ya tiene nuevo entrenador: Guillermo Barros Schelotto. El Mellizo, que vuelve a trabajar en el país después de 7 años, se encontraba sin trabajo desde hace tiempo, por lo que la negociación llegó rápidamente a buen puerto, tras dos fructíferas reuniones. El Mellizo firmará por un año con opción a uno más, se espera que este viernes esté presente en el José Amalfitani en el partido frente a San Martín de San Juan (dirigirá interinamente Marcelo Bravo) y tendrá su debut el lunes 17 ante Atlético en Tucumán.
Tras la interrupción del contrato de Sebastián Domínguez por la acumulación de malos resultados, en Liniers pusieron los ojos en Guillermo y su cuerpo técnico. Ricky Álvarez, director deportivo de Vélez, se reunió con el entrenador de 51 años en City Bell y las charlas avanzaron positivamente. «Acá estamos, esperando volver al ruedo», le confesó el Mellizo a Clarín luego de la reunión, lo que evidencia las ganas que tiene de ponerse el buzo nuevamente, hecho que no realiza desde septiembre de 2023. Sin embargo, tendrá una difícil misión ya que el Fortín está en el fondo de la tabla de posiciones y acumula dos empates y seis derrotas en el ámbito doméstico. Además, no logró anotar ni un solo gol.
Tras imponer sus condiciones innegociables y con el visto bueno de la dirigencia, Guillermo se aseguró un jugoso mercado de pases a mitad de año para cambiar drásticamente el nivel del plantel heredado. Porque en línea con disminuir las deudas, decidieron deshacerse de las figuras del equipo campeón y el plan iba a continuar en los próximos meses, pero eso quedó en stand by.
El indiscutido ídolo de Boca, como ya es habitual, estará acompañado de su hermano Gustavo en esta nueva travesía en el fútbol argentino, donde la situación es mucho más adversa que en las experiencias anteriores. Los Barros Schelotto saben lo que es gritar campeón como entrenadores y lo hicieron en distintos equipos.
Porque en su primera vivencia como dupla técnica, los oriundos de La Plata dejaron una huella imborrable en Lanús. Es que con el Granate conquistaron la Copa Sudamericana 2013, que significó el segundo título internacional en la historia del club. Además, terminó segundo, cuarto y tercero en tres campeonatos consecutivos, y con una identidad muy marcada en el campo de juego. Con el Granate, en total, fueron 170 partidos, con 75 triunfos, 51 empates y 44 derrotas y un 54 % de efectividad.
Su segunda experiencia fue Palermo de Italia, aunque duró mucho menos de lo esperado. Es que tras dirigir solamente cuatro partidos, los mellizos se vieron obligados a abandonar el sueño europeo por problemas con la UEFA. «No tengo la licencia necesaria y no puedo dirigir. No me aprobó la UEFA, la ley está y hay que cumplirla», explicó Guillermo.
Y llegó el sueño de dirigir a Boca. Aunque el comienzo fue irregular, inmediatamente el equipo arrancó con su estilo ofensivo y dinámico y se consagró bicampeón del fútbol argentino en 2016/17 y 2017/18. Luego llegó a la final de la Copa Libertadores 2018, donde perdió la recordada final ante River en Madrid y, tras aquel suceso, decidió dar un paso al costado. Logró un 62 % de efectividad, tras 63 triunfos, 31 empates y 23 derrotas.
Guillermo Barros Schelotto como entrenador de Boca. Foto: Fernando de la Orden Los Ángeles Galaxy fueron el refugio de los Barros Schelotto en Estados Unidos para calmar las aguas. Sin embargo, el paso por la MLS no fue exitoso y tras un primer año aceptable y un segundo lejos del ideal, no continuaron. En 62 partidos dirigidos, el elenco norteamericano ganó 23 partidos, empató ocho y perdió 31.
La última estadía fue en la selección de Paraguay. Los hermanos asumieron en 2021 pero los resultados en las Eliminatorias Sudamericanas sentenciaron su paso por el combinado guaraní. Es que en ocho partidos solo ganaron uno, empataron dos y perdieron los cinco restantes. Por eso, se interrumpió el vínculo en septiembre de 2023.
