De repente, por una publicación en sus redes, el dueño de la firma Agustino se convirtió en uno de los empresarios más buscados por los medios. ¿Qué pasa realmente?
Desde su fundación en el año 2000, doce meses antes que Argentina atravesara uno de los momentos más complicados de su historia en materia económica con Fernando de la Rúa como presidente, la marca fue sinónimo de moda y tendencia para cientos de argentinos. Primero se instaló como Agustino Cueros y con sus camperas, zapatos, cintos, bolsos, carteras, valijas y morrales; rápidamente se ganó un lugar en la preferencia de la gente.
Fue tan buena la aceptación que su fábrica, instalada en la provincia de Córdoba, tuvo que ampliar su porfolio: trajes y sacos de nivel europeo, jeans, remeras, sweaters, zapatillas, y accesorios; algunos de los productos que permitieron que la empresa se conociera en todo el país. Después, con Florenzia, la marca de ropa femenina, se destacó por calidad, moda, y tendencia. En paralelo, Fofotino Kids, pensada para los más pequeños, terminó de cerrar la unión con todos los integrantes de la familia.
Por sus filas pasaron decenas de celebridades del país y del mundo. Mick Jagger, Marcelo Tinelli, Juan Sebastián Verón, Carlos La Mona Jiménez, Marcos el Chino Maidana, y el periodista icónico Lagarto Guizzardi; fueron algunas de las caras reconocidas que la llevaron a posicionarse como una de las más importantes por calidad y presencia. En su momento de apogeo y esplendor… ¡supo tener casi 50 locales distribuidos a lo largo y a lo ancho del país!
Y aunque su CEO y director Gustavo Arce había anunciado hace unos meses “nuevas unidades de negocios con el lanzamiento de Las Heras espacio Moda y con Nueva Era”, sumado a distintas “Mega Tiendas itinerantes por todo el país”; el reciente posteo en sus redes sociales generó incertidumbre. Con fondo negro, letras en blanco para que se pueda leer sin problemas, en esa especie de “comunicado moderno”, decía: “Gracias por acompañarnos en esta historia. 25 años. 2000-2025. Agustino”.
Y lo que en un principio se veía como una simple frase en la que se anunciaba “sus bodas de plata”, a las horas, por la gran cantidad de comentarios de la gente, se volvió un tsunami viral imparable. Cientos de personas entendieron que no se trataba de una comunicación más y lo interpretaron como una despedida. “¿Es verdad lo de Agustino?”, “¿Alguien sabe algo?”, “¿Anunciaron oficialmente qué se mudan?, ¡porque me caso este año y quería comprar el traje en la tienda de la calle Santa Fe!”, fueron algunas de las preguntas de la gente que nunca tuvieron respuestas.
EL QUE CALLA OTORGA. Ninguno de los responsables del área de comunicación de la empresa -algo que hacían habitualmente-, salió a responder los comentarios o las inquietudes que la gente les dejó en su IG (@agustino.oficial). Y Gustavo Arce, su director, la persona que siempre dice presente en los medios de comunicación, eligió el silencio. Recién hoy, a cuarenta y ocho horas del comunicado, se animó a responder algunas preguntas vía WhatsApp, minutos antes del cierre de esta nota.
–Gustavo, se armó un revuelo en las redes por el posteo que la empresa realizó en su Instagram. ¿Qué pasa con Agustino?
–Todo el tiempo los empresarios argentinos tenemos que tomar decisiones y todos los cambios son bienvenidos. En Agustino llevamos un cuarto de siglo y estamos muy orgullosos de lo que hemos conseguido. Pero soy un hombre que nunca se queda quieto, me gustan los nuevos desafíos…
-¿De qué tipo de cambios habla?
-Si repasas la historia de mi vida te vas a dar cuenta que siempre fui igual, nunca me quedé estancado en un solo lugar. Y ese fue un poco el secreto de mi éxito: generar nuevas ideas para seguir creciendo.
-¿Está pensando en crear una nueva marca?
-Hace poco leí al escritor y poeta francés Anatole France, que escribió: “Si no cambiamos, no crecemos. Y si no crecemos, no estamos viviendo de verdad”. Mi familia, amigos, y toda la gente que me conoce, saben muy bien que esta es mi filosofía de vida…
