Una mujer de 41 años, oriunda de South Ayrshire, Inglaterra, estuvo internada cinco días en el hospital luego de que su salud desmejorara tras asistir a una clase de karate. «Cometí un error muy común y le puede pasar a cualquiera», aseguró.
En diálogo con el Daily Mail, Gemma Underwood contó que es una gran amante del fitness, y encontró una nueva pasión desde que descubrió el arte marcial de origen japonés.
Gemma es cinturón amarillo, el primer grado de clasificación que un estudiante puede alcanzar, después del cinturón blanco. Ese color representa la luz del sol, que ilumina el camino del practicante, y el inicio de una nueva era de aprendizaje.
En su día a día es trabajadora en el ámbito de la salud mental, pero en su tiempo libre dedica varias horas al entrenamiento físico. Conoce los dolores musculares después de una rutina intensa, pero esta vez el cuerpo le dolía tanto que le costaba levantarse de la cama.
Notó que tenía los brazos hinchados, y sentía los músculos muy tensos. Pero las alarmas se encendieron aún mas cuando fue al baño y vio que su orina tenía un color oscuro, similar al de la famosa gaseosa cola.
“Noté que algo no andaba bien y pensé que me había excedido un poco en el karate, pero el dolor era desproporcionado al entrenamiento, y cuando vi la orina fui directo a urgencias», indicó la mujer.

Le hicieron análisis de sangre, que revelaron que tenía rabdomiólisis mortal, una enfermedad que se desarrolla cuando el daño a los músculos provoca que las fibras se descompongan y liberen sustancias tóxicas que se acumulan en el torrente sanguíneo y los riñones.
«Es algo que le puede pasar a cualquiera, y entré en pánico porque me dijeron que podía morir sino era tratado a tiempo», expresó. Y agregó: «Los médicos me dijeron que no estaba suficientemente hidratada, que debería haber bebido más agua durante el entrenamiento, un error muy común en muchos atletas».
A pesar de que ya fue dada de alta, y está fuera de peligro, dijo que todavía se siente muy dolorida. “Estoy descansando, sin hacer ningún ejercicio por al menos tres semanas, bebiendo mucho líquido, y sé que la recuperación llevará un buen tiempo«, expresó.

“La orina oscura y el dolor muscular intenso son algunos de los síntomas más notorios. Aprendí que hay que estar hidratado antes de cualquier entrenamiento, no importa cuán intenso sea«, sostuvo.
Además, la mujer recordó el caso de una joven de 21 años que desarrolló insuficiencia renal provocada por rabdomiólisis después de completar un desafío viral de 2.000 sentadillas, y requirió de más de 12 meses de rehabilitación.
¿Qué es la rabdomiólisis?
La rabdomiólisis es una enfermedad potencialmente mortal causada por la rápida descomposición del músculo dañado con la liberación del contenido muscular intracelular, incluida la mioglobina, la creatina quinasa y varios electrolitos, al torrente sanguíneo y al espacio extracelular.
Puede conducir a una insuficiencia renal, así como a ritmos cardíacos peligrosos. La deshidratación es un factor de riesgo conocido para esta enfermedad, ya que suficiente agua protege a los músculos de daños significativos y ayuda a eliminar las fibras rotas y las toxinas del cuerpo.
El tratamiento para esta afección implica recibir líquidos y sales por vía intravenosa. En casos más graves, cuando los pacientes desarrollan daño renal, pueden requerir de diálisis.
El mismo periódico británico indica que no hay cifras oficiales sobre la prevalencia de la enfermedad en Inglaterra, pero a modo de referencia, indica que en Estados Unidos la rabdomiólisis afecta a unas 26.000 personas cada año.