En otro día de conflicto, el Garrahan remota la agenda de lucha de sus trabajadores por un sueldo mejor. Luego de varios días de marchas y protestas, y la oferta del Gobierno de un bono único reparador, el personal médico y no médico del hospital adhirió al nuevo paro convocado por ATE (gremio que engloba los trabajadores del Estado).
La medida de fuerza tiene lugar poco después de que el Ministerio de Salud de Nación amenazara con despedir a residentes en huelga. Debido a la presión de la Casa Rosada, los residentes regresaron a trabajar, pero expresaron su descontento por la política implementada por el Gobierno de Milei, ya que consideran que no soluciona el problema de fondo: el bajísimo ingreso de los profesionales.
Durante la mañana del jueves, médicos, profesionales y técnicos de distintas áreas del hospital se congregaron en la puerta, con carteles y banderas. Luego, a partir del mediodía, marcharán a Plaza de Mayo, donde volverán a exigir mejores salarios y mejores condiciones laborales. «Estamos en una situación crítica. La plata no alcanza. Esto no se sostiene más. Por ese motivo, vamos a volver a marchar». comenta a Clarín Vanesa Resi, jefa de residentes de Nefrologia infantil del Hospital Garrahan . Soy médica, pediatra y Nefrologa.
Desde temprano hasta las diez y media de la mañana, la puerta externa del hospital estuvo bloqueada por sus trabajadores, que protestaban en la calle. Más tarde, una médica con un megáfono convocó a sus compañeros a una asamblea, en la cual debatirían los pasos a seguir. Durante todo ese tiempo, un grupo de guardias custodiaron el ingreso a la institución, y no permitían a nadie que no sea personal del lugar.

Resi cuenta que los residentes volvieron a trabajar desde el martes, presionados por el Gobierno luego de amenazarlos con despedirlos. «Pusieron sus carreras en juego. Y lamentablemente, no van a poder participar de la marcha de hoy. Igual, aún así, siguen en plan de lucha». agregó.
Otra médica, Agustina Miguel -del centro regional de Hemo Terapia- también expresó su enojo con la situación. «No vamos a bajar los brazos, por eso marchamos. Lamentablemente, los residentes no van a poder estar, porque han recibido amenazas de despido. Pero no hubo acuerdo, y vamos a seguir apoyando a todos nuestros compañeros, de todas las áreas. Hace 20 años que trabajo en Garrahan; es una vergüenza lo que están haciendo. Acá vienen chicos de todo el país. Le ponemos el corazón a cada chico que viene al hospital».
Según pudo averiguar Clarín, es hospital está funcionando con el mínimo de personal médico fijo, más los residentes, quien volvieron a ocupar sus puestos.
La oferta del Gobierno
El martes, los médicos residentes del Hospital Garrahan rechazaron el incremento anunciado por el Ministerio de Salud, que implica una suba de $ 300.000 en el bono y llevando a la remuneración total de $ 1.300.000 a partir de julio.
El principal inconveniente con los profesionales tiene que ver con que el bono sería no remunerativo. «Eso significa que no se deriva a aportes, que no entra en el aguinaldo, que no se actualiza», señalaron los médicos. El salario continúa siendo de $ 797.000 en mano.
MG