Ciudad de Guatemala, 29 abr (EFE).- La organización internacional Human Rights Watch (HRW) calificó este martes como un «grave ataque» contra la democracia la detención de los líderes indígenas guatemaltecos Luis Pacheco y Héctor Chaclán, encarcelados la semana pasada por el Ministerio Público (Fiscalía), cuya cúpula está sancionada por Estados Unidos y la Unión Europea.
«La detención de líderes indígenas bajo acusaciones de terrorismo debido a su participación en protestas pacíficas constituye un grave ataque contra quienes defienden principios democráticos y el Estado de derecho en Guatemala», aseveró este martes la directora de la División de las Américas de HRW, Juanita Goebertus, en un comunicado de prensa.
Pacheco, quien es el actual viceministro de Energía y Minas del Gobierno que preside Bernardo Arévalo de León, fue detenido junto a Chaclán el pasado 23 de abril bajo señalamiento de terrorismo y enviados a prisión preventiva.
Ambos fueron parte de la directiva de la organización 48 Cantones de Totonicapán que se plantó en 2023 ante el Ministerio Público para defender los resultados de las elecciones ganadas por el actual presidente, Bernardo Arévalo de León.
«Las autoridades deben garantizar el respeto al debido proceso, retirar estos cargos abusivos y liberar a Pacheco y Chaclán», recalcó Goebertus.
Pacheco y Chaclán fueron acusados por el Ministerio Público por terrorismo y la jueza Carol Patricia Flores, señalada en el pasado por actos de corrupción, los imputó por dicho cargo y también por obstaculización a la acción penal, aunque la Fiscalía buscaba ligarlos a proceso judicial también por otros tres delitos, incluyendo sedición.
Human Rights Watch puntualizó que «funcionarios de la Organización de los Estados Americanos (OEA), la Unión Europea (UE), Estados Unidos, gobiernos de América Latina y Canadá deberían expresar su preocupación por la detención de Pacheco y Chaclán».
En el mismo sentido, «al usar indebidamente el delito de terrorismo para perseguir a críticos, el Ministerio Público de Guatemala replica patrones de abuso observados en otros países de la región, incluyendo en Venezuela y Nicaragua».
De igual manera, «también deberían monitorear el patrón de persecuciones políticas y abusivas por parte del Ministerio Público», agregó la nota de prensa.
Pacheco y Chaclán se unen a otras tres personas detenidas y que son considerados por analistas como «presos políticos» por la persecución en su contra por parte del Ministerio Público: el periodista José Rubén Zamora Marroquín, el exfiscal anticorrupción Stuardo Campo y el abogado Eduardo Masaya.
La cúpula del Ministerio Público, comandada por la fiscal general, Consuelo Porras, y su secretario general, Ángel Pineda, han sido sancionados bajo señalamientos de corrupción por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, incluidos sus intentos por derribar los resultados presidenciales de 2023. EFE