La organización criminal, liderada por Konstantin Rudnev, operaba con fines de trata sexual y reducción a la servidumbre. Una denuncia médica permitió destapar el caso.
Este viernes, la justicia de Río Negro imputó a 21 personas de nacionalidad rusa acusadas de integrar una secta criminal dedicada a la trata de personas y reducción a la servidumbre en San Carlos de Bariloche. La denuncia fue realizada por un grupo de médicos del hospital local, quienes detectaron a mujeres en estado de desnutrición, sin cabello y algunas embarazadas, lo que motivó la investigación.
Entre los imputados se encuentra el líder de la secta, Konstantin Rudnev, quien fue detenido en Bariloche y es señalado como el jefe de la organización criminal. De los 21 acusados, 13 están detenidos —entre ellos, Rudnev— y el resto permanece en libertad bajo restricciones judiciales.
Según el juez de Garantías Gustavo Zapata, la organización captó, trasladó y explotó sexualmente a una joven rusa de 22 años que llegó al país el 21 de marzo y dio a luz en el hospital local. El objetivo era inscribir al bebé como hijo de Rudnev para que este pudiera adquirir la nacionalidad argentina y evitar un pedido de captura internacional proveniente de Montenegro.
Además, una de las mujeres fue acusada de falsedad ideológica en grado de tentativa, ya que intentó alterar la partida de nacimiento del recién nacido para facilitar el trámite de documentación argentina.
Rudnev es conocido por haber liderado la secta Ashram Shambala, y ya había sido condenado a once años de prisión en Europa por abusos sexuales y desapariciones en países del este europeo.