Irene Chikiar Bauer es una pasión literaria cuya voluntad es la de conocer a otros (sobre todo, personajes de la literatura) para explicar con sus vidas la esencia de las épocas en las que se han producido los hechos que la han inclinado a ser espejo de pasados imborrables.
La escritora Irene Chikiar Bauer en la presentación de su libro “Edith Stein”. En “Dain Usina Cultural”. Foto: Federico Gross.Los nombres propios que anteceden al presente libro, Edith Stein. Judía, Filósofa, Santa (Taurus), es un extraordinario viaje al pasado dramático de una mujer atea primero y finalmente religiosa católica y santa.
Este viaje a Edith Stein la ha llenado de conocimiento y de zozobra, como si hubiera acompañado a su biografiada por el intenso via crucis que fue su paso por la vida. Ésta acabó con el asesinato que Hitler ordenó para tantísimos judíos.
Entrevistarla ahora a esta argentina ilustrada, cuando sigue siendo una periodista comprometida con un oficio asimismo en ruinas, como el mundo, es una manera de escucharla hablar con sus personajes, y sobre todo con esta mujer, Edith Stein, símbolo ahora del terrible paso de Hitler por la tierra.
Hablamos en su editorial, en Madrid, cuando Chikiar Bauer estaba acabando su periplo de conversaciones a partir de una obra que resultará inolvidable.
–Cuando recibiste las primeras noticias de esta mujer, Edith Stein, ¿qué te dijo ella, por decirlo así, de tu propia vida que tú no hubieras esperado?
–A los seis años yo leía ya a San Juan de la Cruz, y en 1993 había escrito sobre él y había investigado para un homenaje que se le hizo en la Argentina… Y cuando apareció la noticia de la canonización de Edith Stein me llamó la atención que una mujer de padres judíos que se dedicaba a la filosofía, y era la primera doctora en filosofía en su país, se hubiera convertido al catolicismo, decide ser monja y las circunstancias históricas la llevan a un campo de concentración donde la matan. Y la santifican muchos años después… Todo eso me dijo… Ese recorrido me parecía fascinante, porque siempre me han fascinado las personas que tienen esa experiencia luminosa que resulta ser la fe…
–Un personaje mayor entre tantos personajes a los que has dedicado tu vida de investigadora…
–A mi me fascinó, en su caso, que ella abandonara la fe de su padre para dedicarse por completo a la actividad intelectual, a la filosofía, y llegara por ese camino a la conversión. En mi caso, era muy joven cuando empecé a leer sobre ella. Era algo que me excedía. Así que hice mi carrera, mis maestrías, un doctorado, la biografía de Virginia Woolf, mis libros sobre Felisberto Hernández, Julio Cortázar, Victoria Ocampo o Jean Paul Sartre… La vida de Virginia Woolf constituye un volumen bien grueso, y va por la tercera edición… Las otras me trajeron mucho trabajo, claro, pero cuando acabé con todo pensé que era el momento de Edith Stein…
–A estudiar de nuevo, pues…
–A estudiar filosofía con amigos… Hice cursos para poderle contar a los lectores como la comunicadora que soy, así que me pongo a leer todo lo escrito por ella, o sobre ella, para que los lectores vivan la vida de Edith Stein como alguien que estuvo siempre buscando el sentido de la ética, como hicieron, y yo conté, Virginia Woolf o Victoria Ocampo, mujeres que fueron grandes buscadoras llenas de genio…
La escritora Irene Chikiar Bauer en la presentación de su libro “Edith Stein”. En “Dain Usina Cultural”. Foto: Federico Gross.–Virginia Woolf se suicida, a Edith Stein la matan…
–Una coincidencia… No pasó ni con Cortázar ni con Felisberto Hernández ni con otros biografiados… Pasó con ambas mujeres… En el caso de Stein, quise explicar qué fue aquella experiencia religiosa, y eso no me ha hecho carmelita, ni llegaré a santa, naturalmente, pero esa búsqueda de sentido, de empatizar con el otro, de indagar y de estar cerca del personaje, sí me llegó al alma… Yo no podría hacer una biografía de alguien que no me gustara…
–¿Qué te enseñó cada uno de tus visitados?
–San Juan de la Cruz me enseñó esa maravillosa poesía española… Julio Cortázar es una personalidad que ha ido creando un mundo literario maravilloso para más de una generación… Cuando yo trabajaba sobre su obra veía a los chicos jóvenes interesados en Cortázar, cuando desde la academia o desde la universidad lo miraban con reticencia… Y qué decirte de Victoria Ocampo o de Virginia Woolf, y de la propia Edith Stein, personas cuya capacidad de amor, de entrega y de vocación a mi me ha conmovido…
–¿Crees que esas enseñanzas te han servido para tu propia vida?
–Sí, yo no sería quien soy si no hubiera pasado por todas estas experiencias… Yo era alguien que quería leer desde niña, y quería leer a estos autores en seguida que los fui conociendo… Mi abuelo, mi madre y mi padre, que era cirujano, buscaron el teatro y crearon a mi alrededor un mundo fascinante que yo prolongué con mi pasión por la literatura, por la lectura, por el hecho estético, por la pintura…
–Has escrito un libro impresionante sobre un personaje que fue asesinado en uno de los momentos más terribles del siglo XX. ¿Cómo es hoy tu resumen de aquel episodio que aun dura?
–Cuando Edith Stein habla del judaísmo dice que el Señor eligió un pueblo para nacer en él, que en su vida terrena habló la lengua de este pueblo, pensó con sus metáforas e imagines, observó sus costumbres y le dedicó todas sus energías. Él le ha dado a cada pueblo una misión en esta tierra, y para la eternidad… Mi trabajo tiene mucho de contexto histórico, de polifonía, y por eso yo pongo en relación con Edith Stein a mujeres y hombres de su tiempo, con Hannah Arendt, con Heidegger, con su familia, con su entorno, con Husserl, obviamente. Entonces, esa polifonía lo que nos da es la convicción de que la historia humana tiene algo de cíclico en virtud de lo cual las presentes tragedias tienen algo de lo que debemos aprender. Sigue habiendo personas que son heroicas y son aquellas a las que debemos volver cada vez que se presentan estos momentos trágicos… He escrito sobre ello. Estamos viendo cosas que nos espantan y que pasaron hace cien años y parecía que jamás iban a suceder de nuevo.
–Stein creyó, al poco de entrar Hitler en el poder, que lo que ocurrió no iba a pasar nunca…
–En torno a 1932 ella confiaba en que el futuro no iba a contar con eso… Se equivocó… Ahora nosotros podemos decir que la filosofía y la ciencia alemanas no sería lo que son sin ella, sin Einstein, sin Freud, sin Hannah Arendt…
La escritora Irene Chikiar Bauer en la presentación de su libro “Edith Stein”. En “Dain Usina Cultural”. Foto: Federico Gross.–¿Te ha hecho mejor este libro que te ha llevado al encuentro ?
–Sería bueno que sí, que me hiciera mejor. Sobre todo, ¡después de tanto trabajo! Espero que sí.
–Coincide la salida de tu libro con este momento tan difícil para hablar de quienes, como ella, sufrieron la terrible saña del nazismo. Ahora estamos en una historia distinta, a lo mejor provisional, pero ¿cómo ves tú este episodio?
– Lo que lamento siempre es cómo se manipula a las personas, tanto en lo individual como en lo colectivo, porque ahora estamos hablando del trauma y de la herida. A nivel colectivo, cuando hay una herida tan grande como creo que es la herida que tienen los judíos, piensa que han pasado años y años, pero aun quedan supervivientes… Es tremenda la capacidad que tienen ciertos poderes de manipular, mediante la propaganda, a las personas. Y eso es algo que ha pasado siempre en la historia de la humanidad… Veo todo esto con mucha angustia y desesperación.
La enorme biografía (797 páginas) nos ven cerrar el micrófono con el que hemos recorrido una historia que parece de hoy y no de hace un siglo.
- Es doctora en Letras por la Universidad Nacional de La Plata, magíster en Sociología de la Cultura y Análisis Cultural por la Universidad de San Martín y en Literaturas Comparadas, Universidad Nacional de La Plata. Es docente en la Universidad Nacional de San Martín y en la Universidad Nacional de San Antonio de Areco.
La escritora Irene Chikiar Bauer en la presentación de su libro “Edith Stein”. En “Dain Usina Cultural”. Foto: Federico Gross.- Ha publicado ensayos literarios sobre San Juan de la Cruz, Julio Cortázar, Felisberto Hernández y Juan L. Ortiz. Es autora de los libros Eduarda Mansilla (2013), de la biografía Virginia Woolf, la vida por escrito (2014), Victoria Ocampo (2021) y Virginia Woolf y Victoria Ocampo. Biografía de un encuentro (2023).
- Es autora de la obra teatral Virginia y Victoria, una amistad literaria, que dirigió en el Teatro Payró en 2021. También dirigió la puesta en escena de A puerta cerrada, de Jean-Paul Sartre (2017).
- Ha sido columnista en radio, televisión y diversos medios gráficos. Estuvo a cargo de la Comisión de escritoras de Pen Argentina. Integra la comisión directiva de la Asociación Argentina de Estudios Americanos (AAEA) y es presidente de la Asociación Argentina de Literatura Comparada (AALC).
Edith Stein. Judía. Filósofa. Santa, de Irene Chikiar Bauer (Taurus).





