Redacción El País
Jaime Báez tuvo un gran 2024 con Peñarol llegando hasta las semifinales de la Copa Libertadores y consagrándose campeón de la Liga AUF Uruguaya, pero su imagen cambió cuando decidió irse del club con el pase en su poder en mayo de este año. La Chinita, que ahora arregló su vuelta al club y llegará a Uruguay en los próximos días, explicó los motivos de su alejamiento y sus objetivos ante esta nueva etapa que lo vuelve a acercar al Mirasol.
«Estoy muy bien, feliz de volver, con muchas ganas. Mentalmente estoy muy positivo y queriendo estar ya a la orden del equipo. Va a ser lindo volver, quiero aprovechar la chance que se me dio y quiero estar a la altura para llegar a los objetivos que tiene Peñarol este año», dijo el extremo de 30 años que cree que su vuelta tiene que ver con el destino.
«Se puede decir que es una revancha, pero yo creo que es más destino que se dio así. El mercado está cerrado y hoy en día estoy libre, tengo la posibilidad de poder llegar, el destino lo quiso así y estoy feliz de volver. Estoy con las pilas cargadas a full y espero poder cambiar la última imagen que dejé que sin dudas no fue la mejor», reconoció Báez en entrevista con la radio Sport 890.
«Fueron meses que se hacen largos porque empiezan las ansias de querer jugar, de entrenarte con un equipo con regularidad porque uno que lo hace de toda la vida, lo necesita. Fueron meses largos pero hoy Peñarol está ubicado bien, peleando el Clausura para definir el uruguayo, es lo mínimo para el hincha de Peñarol y si Dios quiere a fin de año se va a festejar. Hay que estar preparado y estoy feliz de formar parte», dijo el futbolista y dio las razones que lo llevaron a regresar a Italia.
La decisión de Báez de regresar a Europa tuvo que ver con su familia. «Yo creo que fue más que nada una cosa mental. No estaba al 100% mentalmente, estaba con cosas en la cabeza que no supe manejar e irme fue un error grande que no quiero volver a cometer», reconoció y destacó el apoyo de su esposa ante la decisión de volver.
«Siempre tuve el apoyo de mi esposa, fue fácil la conversación. Ella quiere lo mejor para mí y para nuestra familia. Cuando me fui para ahí mi bebé no tenía tres meses, los dos somos padres primerizos y se juntaron muchas cosas. Hoy es totalmente distinto», confesó.
Foto: Estefanía Leal.
Una de las razones que lo hicieron decidirse de regresar a Peñarol es el entrenador del Carbonero. «Hace unos tres días hablé con Diego Aguirre, me preguntó cómo estaba, me dio su apoyo siempre, cuando estuve ahí y lo hizo saber otra vez. Son cosas que a uno le quedan y por personas así uno quiere dar el máximo, responderles y tratar de demostrar de que tienen razón. Es uno de los motivos grandes que tengo para estar bien y dejar una linda imagen, no como en el último tiempo. Primero está el objetivo grupal, pero individualmente pienso así», dijo el extremo y se refirió a la lesión de su compañero Javier Cabrera, que le abre una chance de ganarse un lugar en el equipo titular.
«Obviamente que lo de Javi fue una cosa muy fea, le escribí, hablamos bastante y le deseo pronta recuperación porque la estaba rompiendo y era de los puntos más altos del equipo», analizó Jaime Báez.
La lesión del Cangrejo le abre al atacante una posibilidad, pero también el desafió de tener que ponerse rápidamente a punto a para estar a las órdenes de Aguirre. «Me entrené siempre desde que salí de Peñarol, entreno todos los días con un profe acá. Hace años entreno con él en los parates de campeonato. Me falta ritmo de juego, pero físicamente estoy bien. Siempre traté de ser muy profesional. Con Diego hablé mucho de la parte mental porque no es una situación normal, pero tengo muchísimas ganas de estar», dijo Baez, que puede jugar tanto por banda izquierda, como lo venía haciendo, como por derecha para suplir la baja de Cabrera.
«Desde que estuve siempre lo hablamos y él (Diego Aguirre) sabe que para mi no cambia el lado de la cancha. Me siento cómodo jugando por los dos lados. Cambia un poco el perfil por la pierna hábil, pero nada más, además de lo que es el recorrido, que no se negocia».
Foto: Estefanía Leal.
Jaime Baez llega a Peñarol de la misma forma en la que se fue, con el pase en su poder. «Mi idea es hasta diciembre y si Dios quiere seguir un año más. Que esté la voluntad de Peñarol de querer hacerlo, tenemos los dos la voluntad de poder decir que si. Como me fui, hoy la imagen no es la misma y estaría a prueba, por así decirlo», reconoció el futbolista que mantiene contacto con algunos jugadores del plantel Mirasol y reconoció que hubo un sondeo de otro equipo del fútbol uruguayo.
«Con Nacho Sosa hablo muy seguido. Estábamos juntos en la habitación e ibamos juntos a entrenar. A Maxi Olivera lo conozco desde que estábamos en la Fiorentina. También con Javi Méndez y Maxi Silvera, estamos en contacto siempre», dijo la Chinita, que pudo tener a Montevideo Wanderers como opción.
«Directamente a mi no me llamaron. Se que Wanderers habló con mi viejo, pero a él le gusta quedar un poco por fuera. Si en un momento tiene que meterse y decir su parte lo dice. Se que hubo un contacto con él», dijo Báez.
