El miércoles 13 de agosto de 2025 quedó marcado como un día histórico para Julieta Prandi. Tras cinco años de un proceso judicial cargado de dolor, desgaste y revictimización, el Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de Zárate-Campana condenó a su exmarido, Claudio Contardi, a 19 años de prisión, con detención inmediata, por abuso sexual con acceso carnal reiterado, violencia psicológica y amenazas.
Horas después de conocerse la sentencia, la modelo y conductora compartió en su cuenta de Instagram un posteo que combinó una imagen del momento exacto en el que se leyó el veredicto y un extenso texto en el que volcó su alivio, gratitud y compromiso con otras víctimas.
“Me costaba tanto imaginarme el final del túnel… Desde aquella primera vez que me animé a denunciar y me senté a declarar frente a una máquina de escribir los detalles inenarrables a los que era sometida en mi propia casa hasta el día de hoy, pasaron cinco años”, comenzó relatando Prandi, que recordó también las innumerables pericias y declaraciones a las que debió someterse.
En su mensaje, reconoció que en más de una ocasión pensó en rendirse. “Es muy alto el precio… El dolor, el asco, el escarnio, la mirada ajena, las opiniones de los ignorantes, las apelaciones infinitas, y mi cuerpo y mente, destrozados. A eso, justamente a eso, es a lo que nos someten en búsqueda de justicia”, expresó.

Agradeció a los periodistas que acompañaron el caso, a sus abogados Fernando Burlando y Javier Ignacio Baños, al fiscal Christian Fabio y a su círculo más íntimo de familiares, amigos y profesionales de la salud. Mencionó especialmente a su pareja, Emanuel Ortega, “el hombre que lleva cinco años junto a mí enseñándome que la vida es hermosa”.
Prandi dejó en claro que su lucha no fue solo por ella: “Esto es por mí y por todas aquellas víctimas de violencia de género que aún siguen presas, por aquellas que lograron salir pero no obtuvieron justicia y por las miles que no tuvieron vida para contarlo porque las mataron. Por todas 💜”.
El veredicto, que implica la inmediata detención de Contardi, representa para Julieta no solo el cierre de una etapa judicial, sino también el inicio de un proceso de reconstrucción personal y familiar. “Hoy soy dueña del viento, ya no tu presa ideal”, escribió, citando un fragmento de una canción que eligió para simbolizar su renacer.
La sentencia marca un precedente relevante en materia de violencia de género en Argentina y refuerza el mensaje que Prandi sostuvo desde el primer día: la verdad, tarde o temprano, siempre sale a la luz.