Este viernes en Socios del Espectáculo, uno de sus conductores mas precisamente Rodrigo Lussich. En su primer visita salió a a luz sobre su conocimiento acerca de la edad de las jóvenes y esto lo incrimina aún más. Gane quien gane, es importante que comience a enfocarse en los niños, quienes absorben todo lo que ven. Ante esto, el conductor aprovechó la canciones que sonaba para bailar un poco, total este viernes.
Al ritmo de Corazón Partido el conductor lanzó: “Yo estaba de viaje, viajaba por el interior del país en un programa que se llamaba fiestas populares y mi primer amor, mi gran amor Damián, me había dejado”.
“Había salido este tema y yo hacia este paso”, explicó mientras enseñaba la coreografía”, explicó. “Lloraba frente al espejo”, insistió entre risas, mientras danzaba al ritmo de Alejandro Sanz.
Rodrigo Lussich es uno de los Socios del espectáculo. Junto con Adrián Pallares y un gran equipo de panelistas, todas las mañanas analizan los principales rumores y noticias vinculadas con la farándula. Sin embargo, el mismo Lussich contó una intimidad que llamó la atención en medio de su programa.
En el programa hay un segmento que se llama “Escandalones“, en él muestran pequeñas perlitas de los famosos y también de las redes sociales. En ese sentido, mostraron un video viral en el que una señora se reencontraba con un familiar en medio de una escalera y Rodrigo Lussich sorprendió contando un detalle particular.
“Me pasó cuando fui a Florianópolis con mi tía Mirtha“, empezó diciendo el expanelista de Intrusos ante la mirada atenta de sus compañeros. Al escuchar la ciudad de Brasil, el sonidista del programa puso música carioca y los conductores aprovecharon para bailar.
“Fui a ver a la tía Mirtha, a la hermana de mamá. Voy a hacer una composición del lugar. Vos entrás por un porche a la casa, una galería delantera que daba a una ventanita en la que ella lava los platos, la loza de la cocina”, continuó su relato Lusich.
Luego, añadió: “La tía estaba lavando los platos detrás de la ventanita. Yo llegué y ella no me vio porque está un poco corto de vista, tiene miopía avanzada. Cuando yo llegué, la tía desapareció de cuadro y yo no entendía nada”
“Estaba atrás de la ventanita pero se desmayó cuando me reconoció y se cayó. Ella desapareció, quedó la ventana vacía. Tuve suerte porque la puerta estaba abierta entonces entré, la ví en el piso y la pude ayudar”, cerró la anécdota Rodrigo Lussich.
Más información en Gente
TEMAS
