
Barcelona
Las obras de prolongación de la L8 desde plaza Espanya hasta Gràcia se han notado hasta ahora en ambos extremos y en la calle Urgell. Pero las afectaciones en la superficie para preparar las mejoras del transporte público en el subsuelo no se quedarán ahí y a partir de este verano se suma otro punto crítico: la calle Muntaner entre las calles Laforja y Marià Cubí, en el barrio de Sant Gervasi-Galvany.
En este punto ya hace tiempo que hay dos carriles cortados y a partir del 10 de agosto se cortará por completo la circulación durante 13 meses, hasta septiembre del 2026. Aquí no habrá una nueva estación de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), pero es imprescindible construir una salida de emergencia en el tramo entre Francesc Macià y la plaza Gal·la Placídia.

Las obras en la calle Muntaner ya cortan dos de los cuatro carriles desde hace unos meses (Mané Espinosa)
Para minimizar las afectaciones, se cambiará de sentido la calle Amigó. Pasará a ser de bajada en lugar de subida. Con esta alternativa para desplazarse desde la parte alta de la ciudad se quiere evitar que Balmes y Via Augusta se sobrecarguen más de la cuenta.
La ronda perderá un carril por sentido en la Vall d’Hebron
La de Muntaner es la afectación más importante que se incorpora al catálogo de cortes y alteraciones de la movilidad existente en Barcelona por obras este verano. Aún así, no es la única. Los que circulen por la ronda de Dalt entre el 14 de julio y el 4 de septiembre se encontrarán con un carril menos de circulación entre las salidas 5 y 6, a la altura de Vall d’Hebron. Se cortarán los carriles derechos en cada sentido para avanzar en la ejecución de las puertas de las salidas de emergencia del nuevo tramo cubierto, que se sumará al ya ejecutado entre la avenida del Jordà y el instituto Vall d’Hebron. Como ya sucedió el verano pasado, también se realizarán algunos cortes nocturnos.
La de Muntaner y la de la ronda de Dalt son las dos intervenciones más destacadas de las 38 que forman parte del catálogo de obras de verano en Barcelona. Es el momento del año que tradicionalmente se aprovecha coincidiendo con la menor movilidad en la ciudad. De todos modos, las obran han sido validadas por la recién revivida comisión de obras y movilidad del Ayuntamiento, donde se reunen los máximos responsables técnicos de las distintas áreas implicadas para garantizar que hay una coordinación entre las obras y los planes para mitigar sus afectaciones.
La calle Doctor Ferran también se corta desde agosto
Además de un clásico veraniego como son las pavimentaciones, otro de los trabajos relevantes son los que corresponden a la calle Doctor Ferran, en la parte de Les Corts que queda por encima de la Diagonal. En este caso se corta por completo hasta el paseo Manuel Girona a partir del 4 de agosto para avanzar en las obras de construcción de la futura estación Manuel Girona de la L9. Las alternativas de la avenida Pedralbes y Capità Arenas facilitan el tráfico privado. Más problemas supone para los autobuses V3, 6 y 34.
Mientras que esa mejora de transporte público aún no tiene fecha prevista de finalización –a la espera de que la tuneladora de la L9 atascada en Mandri finalice su recorrido–, sí que se verán este mismo verano los efectos del carril bus de la B-23 desde Sant Feliu de Llobregat hasta la Diagonal, con unas obras que finalizarán durante el mes de julio.
A su vez, prosiguen las afectaciones derivadas de la transformación de la calle Balmes y la Meridiana, donde los espacios peatonales están ganando peso allí donde antes reinaba el coche. También finalizarán la reurbanización de los Jardinets de Gràcia, de la Via Laietana y de la Gran Via entre Glòries y la calle Bilbao.
Problemas en el túnel de la Rovira
Las obras que mantienen cortado el túnel de la Rovira de bajada desde hace unos meses estaba previsto que invirtiesen la afectación en agosto y pasasen a hacerlo de subida, pero las dificultades que se han encontrado al hacer la obra por el tipo de roca del subsuelo está retrasando la evolución de los trabajos de conexión de los dos tubos. Esto llevará a alargar unos meses más los trabajos en sentido de bajada.
Como los efectos del corte de tráfico hasta ahora ha sido mejor de lo esperado, se ha decidido no afectar la circulación de subida en ningún momento. Se mantendrá el tráfico cortado de bajada hasta el final de la obra, que se alargará unos dos meses más y llegará hasta febrero del año que viene.